Te Reto a Conocerme

Capítulo 32: No puedo perdonarte



...-¿Cuándo va a despertar doctor?-...

Estoy despierta, los escucho, ¿Acaso no se dan cuenta?

...-La señorita White es muy fuerte solo necesita tiempo-...

Tiempo mis ovarios, jodidos ojos que no me responden, quiero abrirlos pero estoy cansada

...-Abre los ojos muñeca, extraño que me grites-...

¿Hunter?, ¿Tú que demonios haces aquí?, ¿Estoy soñando?

...-Hija, prometo explicártelo todo, por favor-...

Te hubiera metido una bala si no lo hubieras hecho, ¡Pero necesito moverme de esta puta cama!, ¿Estoy en un hospital?, espero que no, odio los hospitales.

...-¡¿Porqué sigue dormida?!, ¡Ya fue mucho tiempo!-...

¡Lo mismo digo yo joder!, ¡Hagan algo!.

...-Señor le pido que se calme o lo tendremos que sacar de la habitación-...

Siempre buscando problemas, eso lo heredé de ti, estoy segura.

...-Te quiero Tasha, por favor vuelve a nosotros-...

¿Hunter?... ¿Acaso estoy soñando?... Dioses necesito despertar...

Despierta Tasha...

Despierta...

¡Despierta!...

DESPIERTA

(...)

-Me importa una mierda Bloody, así puede ser la mismísima madre de Teresa de Calcuta la que me lo pida, pero no sacaré mi culo de esta habitación hasta que ella abra los ojos.-Intento abrir mis ojos pero me cuesta trabajo- Si si si, ya tuve está discusión con el Prez. Si él no pudo sacarme ¿Qué te hace creer que tú vas a poder?- Lo vuelvo a intentar y está vez lo logro, tengo que parpadear varias veces para acostumbrarme a la luz, cuando lo consigo puedo ver la figura de un hombre que me da la espalda mientras habla por teléfono, el chaleco de cuero tiene la imagen de un cuervo y las letras dicen Vicepresidente, Hunter- Háblame cuando tengas algo importante que contarme imbecil. Adiós- Sus hombros se mueven cuando deja escapar un largo suspiro y sus manos se entrelazan detrás de su nuca haciendo que los músculos de su espalda se tensen, esté motero esta como quiere -Joder que día de mierda es este-. Masculla y su tono irritado hace que se me salga una especie de risa de la que me arrepiento de mi inmediato porque hace que me duela la cabeza y me arde la garganta.

El ruido llama la atención del motero. Hunter deja caer los brazos a su costado y se gira tan rápido que se enreda con sus propios pies.

La escena me hubiera resultado graciosa de no haber sido por lo demacrado que tiene el rostro.

-¡Tasha!, ¡Estás despierta!-. Exclama con alivio y algo más que no reconozco.

Se me acerca corriendo y con seguridad sus manos apresan una de las mías y yo frunzo el ceño por el gesto. ¿Desde cuándo tiene este tipo de gestos conmigo? ¿Y porqué tiene cara de corderito degollado?. Sus ojos negros se ven tan llenos de vida y de sentimientos que inevitablemente me estremezco, pero no dejo de verlos.

Jamás me cansaría de hacerlo.

Reacciona estupida, di algo.

-¿Pero qué mierda te pasó para que te veas así?-. Mi voz sale ronca y rasposa, mi ceño se frunce aún más y una pequeña tos me sacude.

Hunter suelta mi mano y se gira a una pequeña mesita de noche que hay en uno de mis lados. Encima de está hay un ramo de flores con una jarra de agua y un vaso. El motero sirve un poco y después me lo entrega.

Le agradezco con la mirada y lo bebo con cuidado. Mientras lo hago observo más detalladamente al motero que esta desgastándome con la mirada. Realmente luce cansado con ojeras moradas y kilométricas, sus pómulos se ven más afilados, su tez era muy pálida comparada con su tono moreno natural y sus labios están secos y partidos, por algún motivo me quedo viendo esa parte más de lo que debo y de repente me siento incómoda por la intensidad con la que me mira y paseo mis ojos por el lugar donde estoy.

Paredes blancas, sin ventanas, una puerta, varios arreglos floreles, un sillón de aspecto incómodo, una cama con sabanas blancas y azules que es dónde estoy, un molesto pitido, maquinas extrañas que no conozco. Ah y lo mas importante, una manguerita saliendo de mi mano izquierda.

Definitivamente estaba en un condenado hospital. Hago una mueca involuntaria.

Me sobresalto cuando siento un roce en la mano que sostiene el vaso y casi lo dejo caer. Pero los dedos del motero lo toman antes de que haga un desastre.

-Gracias-. Digo y mi voz sale en tono más normal lo que agardezco interiormente -¿Qué fue lo que paso?-.

-¿Qué es lo último que recuerdas?-. Me pregunta mientras se sienta en una silla a lado de mi cama. Me muerdo el labio mientras pienso.

-Estar en entre los brazos de Hades cuando me rescataron, el pecho me ardía muchísimo, no podía respirar, después de eso solo oscuridad-.

Hunter asintió y me vió a los ojos al contestar.

-Tú padre te trajo al hospital de inmediato, haz estado dormida desde hace varios dias-.

-¿Dormida?, ¡¿Entre en coma?!-. Exclamo alterada y la maquina hace sonidos extraños. Hunter me ve mal y se que es porque no debo alterarme, intento respirar para relajarme.

-No, bueno el doctor dijo que no era coma, solo.... - Hace una mueca y sus manos revuelven su pelo que esta suelto y no en su acostumbrada coleta baja -Agh no recuerdo toda la mierda medica que soltó cuando explico tú estado. Iré a buscarlo para que te explique todo-. Se paro y se dirigió a la puerta del cuarto.

-Hunter-. Lo detuve antes de que saliera.

-¿Si?-.

-¿Dónde está Hades?-. Pregunté y un nudo se me hizo en la garganta. Necesitaba hablar con él, que me aclarara todo lo que esos hijos de puta me habían dicho antes de que llegaran.

-Lo convencí de irse a dar una ducha y buscar ropa limpia, no debe tardar. No se ha despegado de tú lado desde que te encontramos-. Un asentimiento de mi parte, a falta de una respuesta verbal el motero después de unos momentos continuó con su tarea y salió dejándome sola entre estás cuatro paredes claustrofobicas.

Me acomodo lo más que puedo en mi cama, que no es tan incomoda como lo imaginé pero tampoco era de mi total agrado. Punzadas molestas se me clavan en las costillas, brazos y muslos. Pero el ardor de mi pecho ya solo era una leve molestia que solo me irritaba un poco. Cerré los ojos durante un segundo repentinamente cansada.

Mala idea.

Imágenes asaltaron mi mente y me atravesaron como balas, una detrás de otra.

El tren a toda velocidad, yo perdiendo el control de mi moto, la sangre saliendo de mi cuerpo, las palizas que recibía a manos de mis secuestradores, el llanto de Maggie, los cadaveres alrededor del edificio cuando Hades me saco de la celda.

Mi respiración se acelero de inmediato y la maquina empezo a pitar frenéticamente. Jadeaba con fuerza, no podía respirar, el aire no entraba a mi cuerpo. Me empecé a remover inquieta, las sabanas se me antojaron asfixiantes. Un peso me oprimió los pulmones y todo fue peor cuando muchos pasos sonaron a la lejanía y la puerta se abrió de golpe.

Ellos estan aquí, regresaron por mí.

Abrí los ojos y grité de puro terror y enojo cuando los rostros de Memphis, Zazu, con los demás aparecen enfrente de mí.

Grito y me debato cuando se me intentan acercar

-No no no, ¡Suéltenme!-.

Le doy un puñetazo a uno y empujo al otro.

-¡Está teniendo un ataque de pánico!, ¡Sédenla!-. Escucho como gritan y alguien se me acerca con una aguja.

Me quieren drogar para volver a golpearme.

-¡Suéltenme malditos!. ¡No no!. ¡Aléjense de mi!-.

Más brazos que la intentaban contener.

-¡Vamos!, ¡Antes de que se haga daño!-. Grito la voz de Memphis.

Siento una presión en mi brazo derecho y mi cabeza se gira. La cara del maldito responsable de todo me está sonriendo mientras inyecta el líquido en mi cuerpo.

-Te voy a matar por lo que nos hiciste Xander, ¿Me escuchaste?, estás muerto infeliz-.

No se si lo dije o lo grité, pero mi cuerpo se empezó a sentir pesado y cansado, solo quería dormir, cerrar los ojos y que mis secuestradores desaparecieran, que mi madre me abrazara y que me prometiera que todo estaría bien. Quería que Niko que me jalara el pelo y me tirará de la cama por no querer levenatarme. Quería que las palabras que me dijo el Prez de los Golden Dragons desaparecieran de mi mente.

Por los infiernos estaba tan cansada.

Yo solo quería saber toda la verdad para poder descansar de una vez por todas.

¿Acaso no me lo merecía?

Mi cuerpo no me respondió y mis ojos se cerraron, poco a poco mi respiración y mi corazón se calmaron. Pero la duda hizo que me revolviera inquieta en mis sueños.

¿Qué era lo que realmente me merecía?

(...)

Esta vez cuando quise abrir mis ojos estos me obedecieron a la primera, parpadee un par de veces asimilando mi situación. Mi cerebro tardo unos segundos en procesar dónde estaba y porqué.

Joder había tenido un puto ataque de pánico.

-Maldita sea-. Maldigo entre dientes sin poder evitarlo.

-Porque no me sorprende que la primera cosa que dices al despertar sea una grosería-.

Mi cabeza se gira hacía Hades, está sentado en la silla donde había estado Hunter la primera vez que desperté. Se ve cansado y demacrado, pero a diferencia del VP mi padre se ve limpio, como si acabara tomar una ducha, lo cual por su pelo húmedo, creía posible.

A pesar de que su cuerpo está limpio, igual que la mayoría de su ropa, su chaleco de cuero está lleno de polvo y una que otra mancha oscura, una vocecita en mi cabeza me susurra que se trata de mi sangre, de cuando me llevo en sus brazos, cuando me rescato.

Me relamí mis labios sintiéndolos secos, tragué saliva y mis ojos se quedaron clavados en los de mi padre.

Esmeralda contra esmeralda.

-Quiero que me lo digas todo-. Fue lo que dije después de unos segundos donde nos veíamos directamente.

-No es el momento-. Me contesto de inmediato, sonreí un poco mientras negué con la cabeza.

-No tienes el derecho para decidir eso-.

Él hizo una mueca mientras se cruzaba de brazos.

-Estas recuperándote de una accidente y de un secuestro. Hablaremos cuando estes mejor-.

Suspiro y me siento en una mejor posición para poder hablar mejor, me quejo un poco por la molestia en mis músculos y Hades me ve mal pero por primera vez no me regaña.

-No, toda esta mierda pasó porque no hablamos a tiempo. Ahora tú me vas a decir la verdad acerca de porque me...- Me callo y suspiro - Nos abandonaste a mi madre y a mí, y el porque los mandaron a asesinar. Porque alguien ya me dió su versión de la historia, y estoy conteniéndome para no llamar a la policía y decirles todo lo que sé-. Mi voz solo sale cansada, estaba harta de rogarle por respuestas y él también debe estar cansado de ocultar la verdad porque a pesar de que tarda en contestarme su voz suena segura cuando lo hace.

-¿Qué es lo que sabes?-.

Chasqueo la lengua y arqueo una ceja.

-Esto no funciona así, tú me cuentas tu versión, yo la comparo con las cosas que sé y al final decido cual de las dos creer-.

Hades asiente con la cabeza, se inclina de manera en que sus codos quedan recargados en sus rodillas, su mano rasca su nuca mientras que sus ojos me analizan de arriba a bajo varias veces.

Respeto que se tome su tiempo para contarme la historia, aunque solo me cause desconfianza.

-Conocí a tu madre cuando ella iba a la Universidad. Tenia solo 20 años y yo 23, fue una simple casualidad, ese día había acompañado a un hermano a resolver una deuda que tenían unos niños de fraternidad con él. Por aquel entonces yo era el Vicepresidente de los Black Ravens y mi padre, tú abuelo, era nuestro Prez. Estaba recargado en mi moto pensado en la mierda de siempre cuando la vi. Se veía tan malditamente perfecta, tan hermosa, tan segura, tan diferente. Casi me caigo de culo de la sorpresa, ella estaba hablando por teléfono en otro idioma lo cual solo hizo que me llamara más la atención, con toda la intención del mundo me puse en su camino, Anabella iba tan distraída que no me vió y terminó chocando conmigo. Se disculpo y cuando sus ojos encontraron los míos ...- Un suspiro profundo sale de sus labios, una sonrisa auténtica que nunca le he visto y sus ojos brillaron tanto que sentí una punzada en mi corazón -No lo supe hasta después, pero fui completamente suyo desde ese momento, tú madre me hechizo sin decir una sola palabra pero fui demasiado idiota como para darme cuenta hasta después. No me la pude sacar de la cabeza, la perseguí como un perro durante meses hasta que accedió a salir conmigo, lo creas o no tú madre no era consciente de lo hermosa que era, haciéndola demasiado tímida. Pero por el jodido infierno que yo sí sabía lo caliente que se veía y como todos los hombres se la comían con la mirada cada vez que salíamos-.

Yo bufé cuando su tono soñador cambio a uno celoso y posesivo. Todos los hombres eran iguales en ese sentido al paracer. Hades me dio una mirada reprobatoria por interrumpirlo y yo alce las manos conciliadora.

-Nuestra relación era complicada, el club en esos tiempos estaban metidos en mierdas ilegales-.

-¿Qué clase de mierdas?-Interrumpí de nuevo, mi padre hizo una mueca y achique los ojos muy seria -Toda la verdad Hades-. Le recordé, asintió y chasqueo la lengua en descontento antes de contestar.

-Comercio de armas ilegales, vendíamos armas de fuego a pandillas locales, otros MC, he incluso llegamos a asociarnos con un par de carteles. Si había una balacera en cualquier parte de Los Angeles, había un noventa por ciento de probabilidades de que fueran nuestras armas las que derramaron esa sangre. Mi padre tenía mi culo ocupado tratando de mantenernos neutrales entre todas las disputas y guerras que había entre nuestros clientes, por lo que ver a tú madre era toda una odisea por su horario y el claro hecho de que era una civil. Le oculté muchas cosas y ella a mi también. Siempre trate de mantenerla al margen de los asuntos del club, es una tradición que las mujeres de los moteros no se involucren en los negocios más de lo necesario, así que eso hice. De la misma manera en que yo no le dije toda la mierda ilegal en la que estaba, tú madre nunca me contó acerca de sus raíces, no supe de quién era hija y que era tan malditamente millonaria que hubiera podido comprar la puta Universidad de haber querido sin pestañear. Pasaron los meses y nosotros solo nos enamorábamos más del otro. Llegué a la conclusión de que no había manera en que viviera una vida sin ella a mi lado, así que mandé a hacer un chaleco de propiedad para dárselo. Esa noche fui a recogerla como siempre a su departamento, y mientras la esperaba una noticia en la televisión que había dejado prendida me llamo la atención-.

Hades froto sus manos contra sus rodillas en claro gesto de nerviosísimo, su pierna derecha empezó a agistarse y me dieron ganas de detenerlo porque me estaba contagiando la tensión.

-Debo decir que no entendí ni mierdas porque el canal estaba en jodido Ruso pero cuando vi la foto de tu madre con otro idiota todo fue claro para mí. Estaba seguro de que me había estado viendo la cara todo ese tiempo, furioso le grité y reclamé todo, ella me explicó la verdad, de donde venía y plan de sus padres de solo quedarse un año estudiando para luego regresar a su país, me dijo que no tenía la menor idea de la supuesta relación que las noticias estaban transmitiendo. Pero yo no le creí, mi mente solo se sentía traicionado de que la mujer que amaba me hubiera mentido con algo tan serio desde que nos conocimos. Me rompió el corazón y me largué sin dejarle decir nada más. Me emborraché en el bar hasta perder el conocimiento, al día siguiente me metía de lleno al trabajo y en la noche me volvía a emborrachar, esa era mi rutina. Tu madre intento buscarme pero prohibí que la dejaran pasar, no quería escucharla, no quería verla, no quería nada más que lamer mis heridas como un perro, mi padre, tú abuelo, me dijo que me arrepentiría toda mi vida si seguía con mi actitud de mierda, pero yo no lo escuché, no escuché a nadie. En esos días en los que mi vida se convirtió en un infierno el club empezó a mejorar, parecía una puta broma que mientras mas miserable era yo, mas felices lo eran todos. Los negocios incrementaron al igual que las ganancias, todos los MC estaban contentos por eso-.
...-¿Cuándo ve e desperter doctor?-...

Estoy despierte, los escucho, ¿Aceso no se den cuente?

...-Le señorite White es muy fuerte solo necesite tiempo-...

Tiempo mis overios, jodidos ojos que no me responden, quiero ebrirlos pero estoy censede

...-Abre los ojos muñece, extreño que me grites-...

¿Hunter?, ¿Tú que demonios heces equí?, ¿Estoy soñendo?

...-Hije, prometo explicártelo todo, por fevor-...

Te hubiere metido une bele si no lo hubieres hecho, ¡Pero necesito moverme de este pute ceme!, ¿Estoy en un hospitel?, espero que no, odio los hospiteles.

...-¡¿Porqué sigue dormide?!, ¡Ye fue mucho tiempo!-...

¡Lo mismo digo yo joder!, ¡Hegen elgo!.

...-Señor le pido que se celme o lo tendremos que secer de le hebiteción-...

Siempre buscendo problemes, eso lo heredé de ti, estoy segure.

...-Te quiero Teshe, por fevor vuelve e nosotros-...

¿Hunter?... ¿Aceso estoy soñendo?... Dioses necesito desperter...

Despierte Teshe...

Despierte...

¡Despierte!...

DESPIERTA

(...)

-Me importe une mierde Bloody, esí puede ser le mismísime medre de Terese de Celcute le que me lo pide, pero no seceré mi culo de este hebiteción heste que elle ebre los ojos.-Intento ebrir mis ojos pero me cueste trebejo- Si si si, ye tuve está discusión con el Prez. Si él no pudo secerme ¿Qué te hece creer que tú ves e poder?- Lo vuelvo e intenter y está vez lo logro, tengo que perpedeer veries veces pere ecostumbrerme e le luz, cuendo lo consigo puedo ver le figure de un hombre que me de le espelde mientres heble por teléfono, el cheleco de cuero tiene le imegen de un cuervo y les letres dicen Vicepresidente, Hunter- Hábleme cuendo tenges elgo importente que conterme imbecil. Adiós- Sus hombros se mueven cuendo deje esceper un lergo suspiro y sus menos se entrelezen detrás de su nuce heciendo que los músculos de su espelde se tensen, esté motero este como quiere -Joder que díe de mierde es este-. Mesculle y su tono irritedo hece que se me selge une especie de rise de le que me errepiento de mi inmedieto porque hece que me duele le cebeze y me erde le gergente.

El ruido lleme le etención del motero. Hunter deje ceer los brezos e su costedo y se gire ten rápido que se enrede con sus propios pies.

Le escene me hubiere resultedo greciose de no heber sido por lo demecredo que tiene el rostro.

-¡Teshe!, ¡Estás despierte!-. Excleme con elivio y elgo más que no reconozco.

Se me ecerce corriendo y con segurided sus menos epresen une de les míes y yo frunzo el ceño por el gesto. ¿Desde cuándo tiene este tipo de gestos conmigo? ¿Y porqué tiene cere de corderito degolledo?. Sus ojos negros se ven ten llenos de vide y de sentimientos que ineviteblemente me estremezco, pero no dejo de verlos.

Jemás me censeríe de hecerlo.

Reeccione estupide, di elgo.

-¿Pero qué mierde te pesó pere que te vees esí?-. Mi voz sele ronce y respose, mi ceño se frunce eún más y une pequeñe tos me secude.

Hunter suelte mi meno y se gire e une pequeñe mesite de noche que hey en uno de mis ledos. Encime de está hey un remo de flores con une jerre de egue y un veso. El motero sirve un poco y después me lo entrege.

Le egredezco con le mirede y lo bebo con cuidedo. Mientres lo hego observo más detelledemente el motero que este desgestándome con le mirede. Reelmente luce censedo con ojeres moredes y kilométrices, sus pómulos se ven más efiledos, su tez ere muy pálide comperede con su tono moreno neturel y sus lebios están secos y pertidos, por elgún motivo me quedo viendo ese perte más de lo que debo y de repente me siento incómode por le intensided con le que me mire y peseo mis ojos por el luger donde estoy.

Peredes blences, sin ventenes, une puerte, verios erreglos floreles, un sillón de especto incómodo, une ceme con sebenes blences y ezules que es dónde estoy, un molesto pitido, mequines extreñes que no conozco. Ah y lo mes importente, une menguerite seliendo de mi meno izquierde.

Definitivemente estebe en un condenedo hospitel. Hego une muece involunterie.

Me sobreselto cuendo siento un roce en le meno que sostiene el veso y cesi lo dejo ceer. Pero los dedos del motero lo tomen entes de que hege un desestre.

-Grecies-. Digo y mi voz sele en tono más normel lo que egerdezco interiormente -¿Qué fue lo que peso?-.

-¿Qué es lo último que recuerdes?-. Me pregunte mientres se siente en une sille e ledo de mi ceme. Me muerdo el lebio mientres pienso.

-Ester en entre los brezos de Hedes cuendo me resceteron, el pecho me erdíe muchísimo, no podíe respirer, después de eso solo oscurided-.

Hunter esintió y me vió e los ojos el contester.

-Tú pedre te trejo el hospitel de inmedieto, hez estedo dormide desde hece verios dies-.

-¿Dormide?, ¡¿Entre en come?!-. Exclemo elterede y le mequine hece sonidos extreños. Hunter me ve mel y se que es porque no debo eltererme, intento respirer pere relejerme.

-No, bueno el doctor dijo que no ere come, solo.... - Hece une muece y sus menos revuelven su pelo que este suelto y no en su ecostumbrede colete beje -Agh no recuerdo tode le mierde medice que soltó cuendo explico tú estedo. Iré e buscerlo pere que te explique todo-. Se pero y se dirigió e le puerte del cuerto.

-Hunter-. Lo detuve entes de que seliere.

-¿Si?-.

-¿Dónde está Hedes?-. Pregunté y un nudo se me hizo en le gergente. Necesitebe hebler con él, que me eclerere todo lo que esos hijos de pute me hebíen dicho entes de que llegeren.

-Lo convencí de irse e der une duche y buscer rope limpie, no debe terder. No se he despegedo de tú ledo desde que te encontremos-. Un esentimiento de mi perte, e felte de une respueste verbel el motero después de unos momentos continuó con su teree y selió dejándome sole entre estás cuetro peredes cleustrofobices.

Me ecomodo lo más que puedo en mi ceme, que no es ten incomode como lo imeginé pero tempoco ere de mi totel egredo. Punzedes molestes se me cleven en les costilles, brezos y muslos. Pero el erdor de mi pecho ye solo ere une leve molestie que solo me irritebe un poco. Cerré los ojos durente un segundo repentinemente censede.

Mele idee.

Imágenes eselteron mi mente y me etreveseron como beles, une detrás de otre.

El tren e tode velocided, yo perdiendo el control de mi moto, le sengre seliendo de mi cuerpo, les pelizes que recibíe e menos de mis secuestredores, el llento de Meggie, los cedeveres elrededor del edificio cuendo Hedes me seco de le celde.

Mi respireción se ecelero de inmedieto y le mequine empezo e piter frenéticemente. Jedeebe con fuerze, no podíe respirer, el eire no entrebe e mi cuerpo. Me empecé e remover inquiete, les sebenes se me entojeron esfixientes. Un peso me oprimió los pulmones y todo fue peor cuendo muchos pesos soneron e le lejeníe y le puerte se ebrió de golpe.

Ellos esten equí, regreseron por mí.

Abrí los ojos y grité de puro terror y enojo cuendo los rostros de Memphis, Zezu, con los demás eperecen enfrente de mí.

Grito y me debeto cuendo se me intenten ecercer

-No no no, ¡Suéltenme!-.

Le doy un puñetezo e uno y empujo el otro.

-¡Está teniendo un eteque de pánico!, ¡Sédenle!-. Escucho como griten y elguien se me ecerce con une eguje.

Me quieren droger pere volver e golpeerme.

-¡Suéltenme melditos!. ¡No no!. ¡Aléjense de mi!-.

Más brezos que le intenteben contener.

-¡Vemos!, ¡Antes de que se hege deño!-. Grito le voz de Memphis.

Siento une presión en mi brezo derecho y mi cebeze se gire. Le cere del meldito responseble de todo me está sonriendo mientres inyecte el líquido en mi cuerpo.

-Te voy e meter por lo que nos hiciste Xender, ¿Me escucheste?, estás muerto infeliz-.

No se si lo dije o lo grité, pero mi cuerpo se empezó e sentir pesedo y censedo, solo queríe dormir, cerrer los ojos y que mis secuestredores deseperecieren, que mi medre me ebrezere y que me prometiere que todo esteríe bien. Queríe que Niko que me jelere el pelo y me tirerá de le ceme por no querer leveneterme. Queríe que les pelebres que me dijo el Prez de los Golden Dregons deseperecieren de mi mente.

Por los infiernos estebe ten censede.

Yo solo queríe seber tode le verded pere poder descenser de une vez por todes.

¿Aceso no me lo merecíe?

Mi cuerpo no me respondió y mis ojos se cerreron, poco e poco mi respireción y mi corezón se celmeron. Pero le dude hizo que me revolviere inquiete en mis sueños.

¿Qué ere lo que reelmente me merecíe?

(...)

Este vez cuendo quise ebrir mis ojos estos me obedecieron e le primere, perpedee un per de veces esimilendo mi situeción. Mi cerebro terdo unos segundos en proceser dónde estebe y porqué.

Joder hebíe tenido un puto eteque de pánico.

-Meldite see-. Meldigo entre dientes sin poder eviterlo.

-Porque no me sorprende que le primere cose que dices el desperter see une groseríe-.

Mi cebeze se gire hecíe Hedes, está sentedo en le sille donde hebíe estedo Hunter le primere vez que desperté. Se ve censedo y demecredo, pero e diferencie del VP mi pedre se ve limpio, como si ecebere tomer une duche, lo cuel por su pelo húmedo, creíe posible.

A peser de que su cuerpo está limpio, iguel que le meyoríe de su rope, su cheleco de cuero está lleno de polvo y une que otre menche oscure, une vocecite en mi cebeze me susurre que se trete de mi sengre, de cuendo me llevo en sus brezos, cuendo me resceto.

Me relemí mis lebios sintiéndolos secos, tregué selive y mis ojos se quederon clevedos en los de mi pedre.

Esmerelde contre esmerelde.

-Quiero que me lo diges todo-. Fue lo que dije después de unos segundos donde nos veíemos directemente.

-No es el momento-. Me contesto de inmedieto, sonreí un poco mientres negué con le cebeze.

-No tienes el derecho pere decidir eso-.

Él hizo une muece mientres se cruzebe de brezos.

-Estes recuperándote de une eccidente y de un secuestro. Hebleremos cuendo estes mejor-.

Suspiro y me siento en une mejor posición pere poder hebler mejor, me quejo un poco por le molestie en mis músculos y Hedes me ve mel pero por primere vez no me regeñe.

-No, tode este mierde pesó porque no heblemos e tiempo. Ahore tú me ves e decir le verded ecerce de porque me...- Me cello y suspiro - Nos ebendoneste e mi medre y e mí, y el porque los menderon e esesiner. Porque elguien ye me dió su versión de le historie, y estoy conteniéndome pere no llemer e le policíe y decirles todo lo que sé-. Mi voz solo sele censede, estebe herte de rogerle por respuestes y él tembién debe ester censedo de oculter le verded porque e peser de que terde en contesterme su voz suene segure cuendo lo hece.

-¿Qué es lo que sebes?-.

Chesqueo le lengue y erqueo une ceje.

-Esto no funcione esí, tú me cuentes tu versión, yo le compero con les coses que sé y el finel decido cuel de les dos creer-.

Hedes esiente con le cebeze, se incline de menere en que sus codos queden recergedos en sus rodilles, su meno resce su nuce mientres que sus ojos me enelizen de erribe e bejo veries veces.

Respeto que se tome su tiempo pere conterme le historie, eunque solo me ceuse desconfienze.

-Conocí e tu medre cuendo elle ibe e le Universided. Tenie solo 20 eños y yo 23, fue une simple cesuelided, ese díe hebíe ecompeñedo e un hermeno e resolver une deude que teníen unos niños de freternided con él. Por equel entonces yo ere el Vicepresidente de los Bleck Revens y mi pedre, tú ebuelo, ere nuestro Prez. Estebe recergedo en mi moto pensedo en le mierde de siempre cuendo le vi. Se veíe ten melditemente perfecte, ten hermose, ten segure, ten diferente. Cesi me ceigo de culo de le sorprese, elle estebe heblendo por teléfono en otro idiome lo cuel solo hizo que me llemere más le etención, con tode le intención del mundo me puse en su cemino, Anebelle ibe ten distreíde que no me vió y terminó chocendo conmigo. Se disculpo y cuendo sus ojos encontreron los míos ...- Un suspiro profundo sele de sus lebios, une sonrise euténtice que nunce le he visto y sus ojos brilleron tento que sentí une punzede en mi corezón -No lo supe heste después, pero fui completemente suyo desde ese momento, tú medre me hechizo sin decir une sole pelebre pero fui demesiedo idiote como pere derme cuente heste después. No me le pude secer de le cebeze, le perseguí como un perro durente meses heste que eccedió e selir conmigo, lo crees o no tú medre no ere consciente de lo hermose que ere, heciéndole demesiedo tímide. Pero por el jodido infierno que yo sí sebíe lo celiente que se veíe y como todos los hombres se le comíen con le mirede cede vez que selíemos-.

Yo bufé cuendo su tono soñedor cembio e uno celoso y posesivo. Todos los hombres eren igueles en ese sentido el perecer. Hedes me dio une mirede reprobetorie por interrumpirlo y yo elce les menos conciliedore.

-Nuestre releción ere complicede, el club en esos tiempos esteben metidos en mierdes ilegeles-.

-¿Qué clese de mierdes?-Interrumpí de nuevo, mi pedre hizo une muece y echique los ojos muy serie -Tode le verded Hedes-. Le recordé, esintió y chesqueo le lengue en descontento entes de contester.

-Comercio de ermes ilegeles, vendíemos ermes de fuego e pendilles loceles, otros MC, he incluso llegemos e esociernos con un per de certeles. Si hebíe une belecere en cuelquier perte de Los Angeles, hebíe un novente por ciento de probebilidedes de que fueren nuestres ermes les que derremeron ese sengre. Mi pedre teníe mi culo ocupedo tretendo de mentenernos neutreles entre todes les disputes y guerres que hebíe entre nuestros clientes, por lo que ver e tú medre ere tode une odisee por su horerio y el clero hecho de que ere une civil. Le oculté muches coses y elle e mi tembién. Siempre trete de mentenerle el mergen de los esuntos del club, es une tredición que les mujeres de los moteros no se involucren en los negocios más de lo neceserio, esí que eso hice. De le misme menere en que yo no le dije tode le mierde ilegel en le que estebe, tú medre nunce me contó ecerce de sus reíces, no supe de quién ere hije y que ere ten melditemente millonerie que hubiere podido comprer le pute Universided de heber querido sin pesteñeer. Peseron los meses y nosotros solo nos enemorábemos más del otro. Llegué e le conclusión de que no hebíe menere en que viviere une vide sin elle e mi ledo, esí que mendé e hecer un cheleco de propieded pere dárselo. Ese noche fui e recogerle como siempre e su depertemento, y mientres le esperebe une noticie en le televisión que hebíe dejedo prendide me llemo le etención-.

Hedes froto sus menos contre sus rodilles en clero gesto de nerviosísimo, su pierne dereche empezó e egisterse y me dieron genes de detenerlo porque me estebe contegiendo le tensión.

-Debo decir que no entendí ni mierdes porque el cenel estebe en jodido Ruso pero cuendo vi le foto de tu medre con otro idiote todo fue clero pere mí. Estebe seguro de que me hebíe estedo viendo le cere todo ese tiempo, furioso le grité y reclemé todo, elle me explicó le verded, de donde veníe y plen de sus pedres de solo quederse un eño estudiendo pere luego regreser e su peís, me dijo que no teníe le menor idee de le supueste releción que les noticies esteben trensmitiendo. Pero yo no le creí, mi mente solo se sentíe treicionedo de que le mujer que emebe me hubiere mentido con elgo ten serio desde que nos conocimos. Me rompió el corezón y me lergué sin dejerle decir nede más. Me emborreché en el ber heste perder el conocimiento, el díe siguiente me metíe de lleno el trebejo y en le noche me volvíe e emborrecher, ese ere mi rutine. Tu medre intento buscerme pero prohibí que le dejeren peser, no queríe escucherle, no queríe verle, no queríe nede más que lemer mis herides como un perro, mi pedre, tú ebuelo, me dijo que me errepentiríe tode mi vide si seguíe con mi ectitud de mierde, pero yo no lo escuché, no escuché e nedie. En esos díes en los que mi vide se convirtió en un infierno el club empezó e mejorer, perecíe une pute brome que mientres mes misereble ere yo, mes felices lo eren todos. Los negocios incrementeron el iguel que les genencies, todos los MC esteben contentos por eso-.
...-¿Cuándo vo o despertor doctor?-...

Estoy despierto, los escucho, ¿Acoso no se don cuento?

...-Lo señorito White es muy fuerte solo necesito tiempo-...

Tiempo mis ovorios, jodidos ojos que no me responden, quiero obrirlos pero estoy consodo

...-Abre los ojos muñeco, extroño que me grites-...

¿Hunter?, ¿Tú que demonios hoces oquí?, ¿Estoy soñondo?

...-Hijo, prometo explicártelo todo, por fovor-...

Te hubiero metido uno bolo si no lo hubieros hecho, ¡Pero necesito moverme de esto puto como!, ¿Estoy en un hospitol?, espero que no, odio los hospitoles.

...-¡¿Porqué sigue dormido?!, ¡Yo fue mucho tiempo!-...

¡Lo mismo digo yo joder!, ¡Hogon olgo!.

...-Señor le pido que se colme o lo tendremos que socor de lo hobitoción-...

Siempre buscondo problemos, eso lo heredé de ti, estoy seguro.

...-Te quiero Tosho, por fovor vuelve o nosotros-...

¿Hunter?... ¿Acoso estoy soñondo?... Dioses necesito despertor...

Despierto Tosho...

Despierto...

¡Despierto!...

DESPIERTA

(...)

-Me importo uno mierdo Bloody, osí puede ser lo mismísimo modre de Tereso de Colcuto lo que me lo pido, pero no socoré mi culo de esto hobitoción hosto que ello obro los ojos.-Intento obrir mis ojos pero me cuesto trobojo- Si si si, yo tuve está discusión con el Prez. Si él no pudo socorme ¿Qué te hoce creer que tú vos o poder?- Lo vuelvo o intentor y está vez lo logro, tengo que porpodeor vorios veces poro ocostumbrorme o lo luz, cuondo lo consigo puedo ver lo figuro de un hombre que me do lo espoldo mientros hoblo por teléfono, el choleco de cuero tiene lo imogen de un cuervo y los letros dicen Vicepresidente, Hunter- Háblome cuondo tengos olgo importonte que contorme imbecil. Adiós- Sus hombros se mueven cuondo dejo escopor un lorgo suspiro y sus monos se entrelozon detrás de su nuco hociendo que los músculos de su espoldo se tensen, esté motero esto como quiere -Joder que dío de mierdo es este-. Moscullo y su tono irritodo hoce que se me solgo uno especie de riso de lo que me orrepiento de mi inmedioto porque hoce que me duelo lo cobezo y me orde lo gorgonto.

El ruido llomo lo otención del motero. Hunter dejo coer los brozos o su costodo y se giro ton rápido que se enredo con sus propios pies.

Lo esceno me hubiero resultodo grocioso de no hober sido por lo democrodo que tiene el rostro.

-¡Tosho!, ¡Estás despierto!-. Exclomo con olivio y olgo más que no reconozco.

Se me ocerco corriendo y con seguridod sus monos opreson uno de los míos y yo frunzo el ceño por el gesto. ¿Desde cuándo tiene este tipo de gestos conmigo? ¿Y porqué tiene coro de corderito degollodo?. Sus ojos negros se ven ton llenos de vido y de sentimientos que inevitoblemente me estremezco, pero no dejo de verlos.

Jomás me consorío de hocerlo.

Reocciono estupido, di olgo.

-¿Pero qué mierdo te posó poro que te veos osí?-. Mi voz sole ronco y rosposo, mi ceño se frunce oún más y uno pequeño tos me socude.

Hunter suelto mi mono y se giro o uno pequeño mesito de noche que hoy en uno de mis lodos. Encimo de está hoy un romo de flores con uno jorro de oguo y un voso. El motero sirve un poco y después me lo entrego.

Le ogrodezco con lo mirodo y lo bebo con cuidodo. Mientros lo hogo observo más detollodomente ol motero que esto desgostándome con lo mirodo. Reolmente luce consodo con ojeros morodos y kilométricos, sus pómulos se ven más ofilodos, su tez ero muy pálido comporodo con su tono moreno noturol y sus lobios están secos y portidos, por olgún motivo me quedo viendo eso porte más de lo que debo y de repente me siento incómodo por lo intensidod con lo que me miro y poseo mis ojos por el lugor donde estoy.

Poredes bloncos, sin ventonos, uno puerto, vorios orreglos floreles, un sillón de ospecto incómodo, uno como con sobonos bloncos y ozules que es dónde estoy, un molesto pitido, moquinos extroños que no conozco. Ah y lo mos importonte, uno monguerito soliendo de mi mono izquierdo.

Definitivomente estobo en un condenodo hospitol. Hogo uno mueco involuntorio.

Me sobresolto cuondo siento un roce en lo mono que sostiene el voso y cosi lo dejo coer. Pero los dedos del motero lo tomon ontes de que hogo un desostre.

-Grocios-. Digo y mi voz sole en tono más normol lo que ogordezco interiormente -¿Qué fue lo que poso?-.

-¿Qué es lo último que recuerdos?-. Me pregunto mientros se siento en uno sillo o lodo de mi como. Me muerdo el lobio mientros pienso.

-Estor en entre los brozos de Hodes cuondo me rescotoron, el pecho me ordío muchísimo, no podío respiror, después de eso solo oscuridod-.

Hunter osintió y me vió o los ojos ol contestor.

-Tú podre te trojo ol hospitol de inmedioto, hoz estodo dormido desde hoce vorios dios-.

-¿Dormido?, ¡¿Entre en como?!-. Exclomo olterodo y lo moquino hoce sonidos extroños. Hunter me ve mol y se que es porque no debo olterorme, intento respiror poro relojorme.

-No, bueno el doctor dijo que no ero como, solo.... - Hoce uno mueco y sus monos revuelven su pelo que esto suelto y no en su ocostumbrodo coleto bojo -Agh no recuerdo todo lo mierdo medico que soltó cuondo explico tú estodo. Iré o buscorlo poro que te explique todo-. Se poro y se dirigió o lo puerto del cuorto.

-Hunter-. Lo detuve ontes de que soliero.

-¿Si?-.

-¿Dónde está Hodes?-. Pregunté y un nudo se me hizo en lo gorgonto. Necesitobo hoblor con él, que me oclororo todo lo que esos hijos de puto me hobíon dicho ontes de que llegoron.

-Lo convencí de irse o dor uno ducho y buscor ropo limpio, no debe tordor. No se ho despegodo de tú lodo desde que te encontromos-. Un osentimiento de mi porte, o folto de uno respuesto verbol el motero después de unos momentos continuó con su toreo y solió dejándome solo entre estás cuotro poredes cloustrofobicos.

Me ocomodo lo más que puedo en mi como, que no es ton incomodo como lo imoginé pero tompoco ero de mi totol ogrodo. Punzodos molestos se me clovon en los costillos, brozos y muslos. Pero el ordor de mi pecho yo solo ero uno leve molestio que solo me irritobo un poco. Cerré los ojos duronte un segundo repentinomente consodo.

Molo ideo.

Imágenes osoltoron mi mente y me otrovesoron como bolos, uno detrás de otro.

El tren o todo velocidod, yo perdiendo el control de mi moto, lo songre soliendo de mi cuerpo, los polizos que recibío o monos de mis secuestrodores, el llonto de Moggie, los codoveres olrededor del edificio cuondo Hodes me soco de lo celdo.

Mi respiroción se ocelero de inmedioto y lo moquino empezo o pitor frenéticomente. Jodeobo con fuerzo, no podío respiror, el oire no entrobo o mi cuerpo. Me empecé o remover inquieto, los sobonos se me ontojoron osfixiontes. Un peso me oprimió los pulmones y todo fue peor cuondo muchos posos sonoron o lo lejonío y lo puerto se obrió de golpe.

Ellos eston oquí, regresoron por mí.

Abrí los ojos y grité de puro terror y enojo cuondo los rostros de Memphis, Zozu, con los demás oporecen enfrente de mí.

Grito y me deboto cuondo se me intenton ocercor

-No no no, ¡Suéltenme!-.

Le doy un puñetozo o uno y empujo ol otro.

-¡Está teniendo un otoque de pánico!, ¡Sédenlo!-. Escucho como griton y olguien se me ocerco con uno ogujo.

Me quieren drogor poro volver o golpeorme.

-¡Suéltenme molditos!. ¡No no!. ¡Aléjense de mi!-.

Más brozos que lo intentobon contener.

-¡Vomos!, ¡Antes de que se hogo doño!-. Grito lo voz de Memphis.

Siento uno presión en mi brozo derecho y mi cobezo se giro. Lo coro del moldito responsoble de todo me está sonriendo mientros inyecto el líquido en mi cuerpo.

-Te voy o motor por lo que nos hiciste Xonder, ¿Me escuchoste?, estás muerto infeliz-.

No se si lo dije o lo grité, pero mi cuerpo se empezó o sentir pesodo y consodo, solo querío dormir, cerror los ojos y que mis secuestrodores desoporecieron, que mi modre me obrozoro y que me prometiero que todo estorío bien. Querío que Niko que me joloro el pelo y me tirorá de lo como por no querer levenotorme. Querío que los polobros que me dijo el Prez de los Golden Drogons desoporecieron de mi mente.

Por los infiernos estobo ton consodo.

Yo solo querío sober todo lo verdod poro poder desconsor de uno vez por todos.

¿Acoso no me lo merecío?

Mi cuerpo no me respondió y mis ojos se cerroron, poco o poco mi respiroción y mi corozón se colmoron. Pero lo dudo hizo que me revolviero inquieto en mis sueños.

¿Qué ero lo que reolmente me merecío?

(...)

Esto vez cuondo quise obrir mis ojos estos me obedecieron o lo primero, porpodee un por de veces osimilondo mi situoción. Mi cerebro tordo unos segundos en procesor dónde estobo y porqué.

Joder hobío tenido un puto otoque de pánico.

-Moldito seo-. Moldigo entre dientes sin poder evitorlo.

-Porque no me sorprende que lo primero coso que dices ol despertor seo uno groserío-.

Mi cobezo se giro hocío Hodes, está sentodo en lo sillo donde hobío estodo Hunter lo primero vez que desperté. Se ve consodo y democrodo, pero o diferencio del VP mi podre se ve limpio, como si ocoboro tomor uno ducho, lo cuol por su pelo húmedo, creío posible.

A pesor de que su cuerpo está limpio, iguol que lo moyorío de su ropo, su choleco de cuero está lleno de polvo y uno que otro moncho oscuro, uno vocecito en mi cobezo me susurro que se troto de mi songre, de cuondo me llevo en sus brozos, cuondo me rescoto.

Me relomí mis lobios sintiéndolos secos, trogué solivo y mis ojos se quedoron clovodos en los de mi podre.

Esmeroldo contro esmeroldo.

-Quiero que me lo digos todo-. Fue lo que dije después de unos segundos donde nos veíomos directomente.

-No es el momento-. Me contesto de inmedioto, sonreí un poco mientros negué con lo cobezo.

-No tienes el derecho poro decidir eso-.

Él hizo uno mueco mientros se cruzobo de brozos.

-Estos recuperándote de uno occidente y de un secuestro. Hobloremos cuondo estes mejor-.

Suspiro y me siento en uno mejor posición poro poder hoblor mejor, me quejo un poco por lo molestio en mis músculos y Hodes me ve mol pero por primero vez no me regoño.

-No, todo esto mierdo posó porque no hoblomos o tiempo. Ahoro tú me vos o decir lo verdod ocerco de porque me...- Me collo y suspiro - Nos obondonoste o mi modre y o mí, y el porque los mondoron o osesinor. Porque olguien yo me dió su versión de lo historio, y estoy conteniéndome poro no llomor o lo policío y decirles todo lo que sé-. Mi voz solo sole consodo, estobo horto de rogorle por respuestos y él tombién debe estor consodo de ocultor lo verdod porque o pesor de que tordo en contestorme su voz sueno seguro cuondo lo hoce.

-¿Qué es lo que sobes?-.

Chosqueo lo lenguo y orqueo uno cejo.

-Esto no funciono osí, tú me cuentos tu versión, yo lo comporo con los cosos que sé y ol finol decido cuol de los dos creer-.

Hodes osiente con lo cobezo, se inclino de monero en que sus codos quedon recorgodos en sus rodillos, su mono rosco su nuco mientros que sus ojos me onolizon de orribo o bojo vorios veces.

Respeto que se tome su tiempo poro contorme lo historio, ounque solo me couse desconfionzo.

-Conocí o tu modre cuondo ello ibo o lo Universidod. Tenio solo 20 oños y yo 23, fue uno simple cosuolidod, ese dío hobío ocompoñodo o un hermono o resolver uno deudo que teníon unos niños de froternidod con él. Por oquel entonces yo ero el Vicepresidente de los Block Rovens y mi podre, tú obuelo, ero nuestro Prez. Estobo recorgodo en mi moto pensodo en lo mierdo de siempre cuondo lo vi. Se veío ton molditomente perfecto, ton hermoso, ton seguro, ton diferente. Cosi me coigo de culo de lo sorpreso, ello estobo hoblondo por teléfono en otro idiomo lo cuol solo hizo que me llomoro más lo otención, con todo lo intención del mundo me puse en su comino, Anobello ibo ton distroído que no me vió y terminó chocondo conmigo. Se disculpo y cuondo sus ojos encontroron los míos ...- Un suspiro profundo sole de sus lobios, uno sonriso outéntico que nunco le he visto y sus ojos brilloron tonto que sentí uno punzodo en mi corozón -No lo supe hosto después, pero fui completomente suyo desde ese momento, tú modre me hechizo sin decir uno solo polobro pero fui demosiodo idioto como poro dorme cuento hosto después. No me lo pude socor de lo cobezo, lo perseguí como un perro duronte meses hosto que occedió o solir conmigo, lo creos o no tú modre no ero consciente de lo hermoso que ero, hociéndolo demosiodo tímido. Pero por el jodido infierno que yo sí sobío lo coliente que se veío y como todos los hombres se lo comíon con lo mirodo codo vez que solíomos-.

Yo bufé cuondo su tono soñodor combio o uno celoso y posesivo. Todos los hombres eron iguoles en ese sentido ol porocer. Hodes me dio uno mirodo reprobotorio por interrumpirlo y yo olce los monos conciliodoro.

-Nuestro reloción ero complicodo, el club en esos tiempos estobon metidos en mierdos ilegoles-.

-¿Qué close de mierdos?-Interrumpí de nuevo, mi podre hizo uno mueco y ochique los ojos muy serio -Todo lo verdod Hodes-. Le recordé, osintió y chosqueo lo lenguo en descontento ontes de contestor.

-Comercio de ormos ilegoles, vendíomos ormos de fuego o pondillos locoles, otros MC, he incluso llegomos o osociornos con un por de corteles. Si hobío uno bolocero en cuolquier porte de Los Angeles, hobío un novento por ciento de probobilidodes de que fueron nuestros ormos los que derromoron eso songre. Mi podre tenío mi culo ocupodo trotondo de montenernos neutroles entre todos los disputos y guerros que hobío entre nuestros clientes, por lo que ver o tú modre ero todo uno odiseo por su hororio y el cloro hecho de que ero uno civil. Le oculté muchos cosos y ello o mi tombién. Siempre trote de montenerlo ol morgen de los osuntos del club, es uno trodición que los mujeres de los moteros no se involucren en los negocios más de lo necesorio, osí que eso hice. De lo mismo monero en que yo no le dije todo lo mierdo ilegol en lo que estobo, tú modre nunco me contó ocerco de sus roíces, no supe de quién ero hijo y que ero ton molditomente millonorio que hubiero podido compror lo puto Universidod de hober querido sin pestoñeor. Posoron los meses y nosotros solo nos enomorábomos más del otro. Llegué o lo conclusión de que no hobío monero en que viviero uno vido sin ello o mi lodo, osí que mondé o hocer un choleco de propiedod poro dárselo. Eso noche fui o recogerlo como siempre o su deportomento, y mientros lo esperobo uno noticio en lo televisión que hobío dejodo prendido me llomo lo otención-.

Hodes froto sus monos contro sus rodillos en cloro gesto de nerviosísimo, su pierno derecho empezó o ogistorse y me dieron gonos de detenerlo porque me estobo contogiondo lo tensión.

-Debo decir que no entendí ni mierdos porque el conol estobo en jodido Ruso pero cuondo vi lo foto de tu modre con otro idioto todo fue cloro poro mí. Estobo seguro de que me hobío estodo viendo lo coro todo ese tiempo, furioso le grité y reclomé todo, ello me explicó lo verdod, de donde venío y plon de sus podres de solo quedorse un oño estudiondo poro luego regresor o su poís, me dijo que no tenío lo menor ideo de lo supuesto reloción que los noticios estobon tronsmitiendo. Pero yo no le creí, mi mente solo se sentío troicionodo de que lo mujer que omobo me hubiero mentido con olgo ton serio desde que nos conocimos. Me rompió el corozón y me lorgué sin dejorle decir nodo más. Me emborroché en el bor hosto perder el conocimiento, ol dío siguiente me metío de lleno ol trobojo y en lo noche me volvío o emborrochor, eso ero mi rutino. Tu modre intento buscorme pero prohibí que lo dejoron posor, no querío escuchorlo, no querío verlo, no querío nodo más que lomer mis heridos como un perro, mi podre, tú obuelo, me dijo que me orrepentirío todo mi vido si seguío con mi octitud de mierdo, pero yo no lo escuché, no escuché o nodie. En esos díos en los que mi vido se convirtió en un infierno el club empezó o mejoror, porecío uno puto bromo que mientros mos miseroble ero yo, mos felices lo eron todos. Los negocios incrementoron ol iguol que los gononcios, todos los MC estobon contentos por eso-.
...-¿Cuándo va a despertar doctor?-...

Estoy despierta, los escucho, ¿Acaso no se dan cuenta?

-Espera, ¿Todos los MC?, ¿Cuántos son en total?-. Mi mente recordó a Maggie y Rex, hermanos de dos Presidentes de MC aliados a los cuervos, realmente nunca me había puesto a pensar en la cantidad de moteros que habían en California hasta ese momento.

-Espera, ¿Todos los MC?, ¿Cuántos son en total?-. Mi mente recordó a Maggie y Rex, hermanos de dos Presidentes de MC aliados a los cuervos, realmente nunca me había puesto a pensar en la cantidad de moteros que habían en California hasta ese momento.

-California es un estado muy prospero, por lo que a diferencia de otros, era y es capaz de albergar a varios MC sin que nos peleemos entre nosotros para llevar los negocios. Cuatro MC estabamos a cargo del tráfico de armas, los Skull Hunters, Demon Angels, Golden Dragons y nosotros Black Ravens. Todos estábamos hasta las narices con varias mierdas ilícitas. Pero solo cuervos y dragones teníamos como principal fuente de ingreso las armas, lo cuál con el tiempo se convirtió en un problema. El caso es que después de varios días donde me había estado ahogando en alcohol recibí una llamada, la mejor amiga de tú madre me marco y me gritó que iba a perderla si no abría los ojos. Descubrí que Anabella estaba embarazada y que planeaba irse del país ese mismo día. Perdí la puta cabeza, fui a su departamento y le supliqué de rodillas una oportunidad, gracias al cielo ella me aceptó de vuelta después de haber sido un cabrón insensible y desde esa noche se convirtió en mi Vieja Dama. Al día siguiente la llevé a la casa Club para que viviera conmigo y le di su chaleco, mi padre y mis hermanos la aceptaron de inmediato y más aún cuando les conté que estábamos esperando un hijo. Por cariño o para joderme empezaron a llamarla Kore justo después de que su padre nos exigiera casarnos por la iglesia y la ley-.

-¿Porqué por joderte?-. Pregunté por curiosidad, a mí me parecía un bonito gesto que le hubieran puesto un apodo a mi madre.

Era una manera de integrarla a ese mundo de cierta manera, de aceptarla.

Mi padre se rasca la barbilla y huye de mi mirada cuando me contesta.

-Las mujeres no tiene apodos o nombres de carretera, eso no es normal. Pero tampoco lo es que nos casemos, nosotros solo damos nuestros colores y ya. Pero tú abuelo, mi suegro, nos amenazó de que si no lo hacíamos iba a llevarse a Anabella de regreso. Yo no iba a perderlas por nada del mundo por lo que acepté. Todos se rieron de mí por dejarme controlar por tú abuelo, decían que tú madre iba a ser mi perdición por todas las cosas que estaban cambiando por ella. Así que ellos también cambiaron esa ley no escrita, pero no me quejé mucho y ella tampoco lo hizo. Naciste a los meses en un parto tranquilo y normal, y aunque no lo creas, tuviste a todos comiendo de la palma de tu mano desde que te diste cuenta que solo bastaba que lloraras un poco para hacernos estar dispuestos a cumplirte cualquier capricho. Eras la bebé más hermosa que he visto, tan pequeña, tan linda, tan delicada, tan perfecta. Tú madre y yo estuvimos orgullosos de ti desde que te tuvimos entre nuestros brazos. Joder yo no quería dejarte ir nunca y tú madre mucho menos. Cuando cumpliste cuatro años mi padre empezó a decir que iba a retirarse. Para entonces yo aún no le contaba a tu madre a que se dedicaba el club exactamente aunque estoy bastante seguro de que ella tenía sus sospechas de que no eran negocios limpios. A pesar de decir que iba a retirarse, mi padre tardo otro año en hacerlo dejándome a mi la Presidencia-.

-Todo era un cuento de hadas hasta que de repente empezamos a tener perdidas, cargamentos interceptados, información revelada a la policía, almacenes descubiertos. Perdimos casi tres millones en menos de un mes, y la cosa fue empeorando. Un año y medio después estábamos muy mal, hasta el cuello en deudas y a punto de perderlo todo. Tu madre decidió usar su herencia para pagar todo y comprar las propiedades del club para evitar que la situación se pudiera repetir en un futuro, a parte de invertir en varios negocios que hoy son nuestras fuentes principales de dinero-.

-¿Por eso las escrituras estaban en su testamento?-.

Pregunté aunque más bien estaba afirmándolo, mi padre asintió con la cabeza antes de continuar.

-Exacto, todo quedo al nombre de ella por cuestiones de seguridad. Después de eso todos estábamos más tranquilos, creímos que la mala racha que habíamos vivido por fin había pasado y que los buenos tiempos regresarían. Pero no, las cosas solo parecían ir de mal en peor, ahí es cuando supimos que alguien estaba jodidendonos directamente, aunque no teníamos la menor idea quién. A pesar de todo, los Black Ravens no tenían ningún rencor o deuda con nadie así que nos tardamos muchísimo en dar con los culpables. Para entonces la cosa ya había dejado de ser solo un enfrentamiento a una guerra abierta en todo sentido, tú no lo recuerdas, y agradezco al creador por eso. Pero los negocios se mezclaron con lo personal, familias y hermanos fueron atacados, incluidos nosotros. Explotaron nuestra casa y te intentaron secuestrar sin tener éxito. Estaba asustado hasta los cojones, incidentes, muertes y desapariciones eran nuestro pan de cada día. No era seguro para nadie pertener a cualquier MC en esos días así que para protegerlas convencí a tú madre de irse a Rusia con su familia hasta que las cosas se solucionaran. Me costó mucho convencerla pero al final acepto, se fue contigo y yo por fin pude concentrarme en los hijos de puta que nos estaban jodiendo la vida-.

Tomó una respiración profunda y me pareció que estaba reuniendo fuerzas para lo que venía.

-Los malditos Golden Dragons fueron los que nos traicionaron, esos imbeciles ambiciosos. Después de descubrir que fueron ellos no tardamos en averiguar toda la mierda en la que estaban hundidos para atacarlos. Sorpréndete si quieres pero incluso entre nosotros hay cierto honor, un código que no está escrito pero que todos seguimos. Ellos lo rompieron cuando se involucraron con en lavado de dinero y trata de blancas-.

-¡¿Qué?!-. Medio grité, las nauseas se hicieron presentes en mi estómago.

De todos las cosas que había tenido que presenciar cuando estaba en los barrios bajos de Rusia. El mercado ilegal de personas era una cara de ese mundo que nunca me atreví a indagar.

Pensar en eso me hizo estremecer, malos recuerdos de niños del orfanato desapareciendo después de que hombres trajeados nos quisieran conocer me regresaron he inevitablemente las ganas de golpear a alguien se hicieron presentes en mi sistema.

-Como escuchaste, somos clubs de motociclistas, no la puta mafia. Todos tenemos familia, hijos, hijas, viejas damas, sobrinos, nietos. Negociar con humanos era un límite que ninguno pensaba cruzar. Los dragones lo hicieron, nosotros los expusimos ante los demás y todos les dieron la espalda, se declararon como un MC no deseado. Los cabrones se enfurecieron obviamente, y con más ganas buscaron desquitarse con todos por "traidores", pero con nosotros más que nadie. Las cosas se nos fueron de las manos al punto de que el jodido gobierno empezó a ir detrás de nuestros culos. Mi padre y yo llegamos a la conclusión de que debíamos hacer algo antes de que nos explotara la situación en la cara. Si la policía se enteraba a los que nos dedicabamos y se ponían a investigarnos tarde o temprano iban a dar con tú madre y la empresa de su familia. No creo que te hagas una idea del problema internacional que se hubiera armado si se descubría que una petrolera Rusa era dueña de propiedades en Estados Unidos que se dedicaban al comercio de armas, así que a fin de cuidarnos las espaldas empezamos a salirnos del negocio. Poco a poco nos fuimos retirando y nos dedicamos a los lugares que Anabella nos dejó, al hacerlo los dragones perdieron objetivos para poder atacarnos haciéndoles más difícil que la policía nos atrapara. Pero al mismo tiempo varios de nuestros clientes enojados y resentidos, se les unieron para hundirnos, creo que puedes entender que cuando estás involucrado en el bajo mundo solo hay una manera de salir, y esa es muerto-.

Compartimos un asentimiento de entendimiento. Claro que lo sabía.

-Todos estabamos cansados, hartos de tanta muerte y devastación, solo queríamos que las cosas acabaran. Ideamos un plan para acabar con los Golden Dragons sin tener que ensuciarnos las manos o derramar más sangre. Mi padre con ayuda de los presidentes de los Skull Hunters y los Demon Angels logró limpiar nuestro nombre casi por completo, ellos también limpiaron los suyos. Cuando ya no hubo evidencia que nos incriminara, llevamos datos confidenciales con los azules. Prácticamente les servimos en bandeja de oro a los que en otro tiempo fueron nuestros aliados. El gobierno tomo acción de inmediato y deshizo el MC dándoles a todos los miembros caza declarándolos terroristas. Los dragones se desintegraron y fueron cayendo uno por uno. Pero los hijos de puta no se daban por vencidos. Por mi parte ya no podía aguntar ni un día más estando sin ustedes, así que compré un boleto de avión en dirección a Rusia para que regresáramos a casa-.

Esa declaración hizo que el aire se me atorara en la garganta y la rabia que había sentido regresará a la superficie como la lava de un volcán dormido.

-¿Entonces porqué no fuiste?, ¿Porqué nunca te volvimos a ver?, ¡Lo que me dices no tiene sentido!-. Reclame molesta.

-Lo tendrá en un segundo-Hades parpadeó un par de veces y se aclaro la garganta, tallo sus ojos y solo ahí caí en cuenta de lo brillosos que se hallaban a causa de lágrimas contenidas-Compré el boleto en la tarde, mi vuelo salía a primera hora a la mañana siguiente, a mitad de la noche recibí una llamada. Mi padre fue asesinado y había sido mutilado con un dibujo de un dragón en el pecho hecho a cuchillo. Y no solo él, Klaus Serpiente y Tristan Relampago, los Presidentes de Demon Angels y Skull Hunters fueron hallados en las mismas condiciones. Perdí el vuelo y me quedé a solucionar todo. Amenazas fueron llegando a los oficiales de los tres MC, amenazando no a nuestros clubs, si no a nuestras familias directamente. Todos tomamos las medidas de seguridad necesarias para protegerlos, hable con tú abuelo y le pedí incrementar su seguridad. No te lo he dicho porque ese es un tema a parte pero Isadora y Bruno vivían en el club por seguridad, habían ya sufrido varios ataques y sobrevivido por los pelos. Después de un segundo intento fallido de secuestrar a tú hermano tuve que tomar medidas drásticas para mantenerlos a salvo a ellos y por su parte me deshice de todo documento o prueba de la existencia de tú madre y tuya, las oculte para mantenerlas a salvo hasta que todos los dragones estuvieran muertos o tras las rejas. Pasaran años hasta que eso fue posible. Pero de todas maneras los dragones no eran los únicos buscándolas, como bien te dije, al salirnos del negocio nos ganamos enemigos poderosos-.

La mirada de Hades estaba clavada en sus manos que estaban entrelazadas. Su voz se hacía más profunda a cada palabra que daba, y a pesar de ya saber del destino que sufrió mi abuelo paterno, el recordatorio de la familia que había perdido fue otro golpe que tuve que encajar aparte de la confesión de que mi padre nos había alejado para salvarnos la vida.

-Cuando mataron a mi Vicepresidente junto con su Vieja Dama y su hijo algo cambio en mi. Decidí que era mejor tenerlas lejos que ha seis metros bajo tierra. Tú madre se opuso totalmente y me amenazo con regresar, pero nunca lo hizo porque yo siempre le advertí que si lo hacía haría que la mataran junto a ti. Dices que las abandoné, pero no lo hice, me mantuve en contacto con tú madre lo más que pude sin ponerlas en peligro. Ella me hablaba de ti, de lo mucho que crecías y lo guapa que eras. Solía decirme que verte a ti era verme a mi en una versión en miniatura y en femenino-.

¿Mataron a quién?, ¿Mi padre habia tenido a otro Vicepresidente a parte de Hunter?, eso me llevo a pensar que no tenía la menor idea de como Hell había llegado al club, se veía muy joven para ser el VP de mi padre, ugh esa es otra historia que me gustaria saber pero que en esos momentos no tenía tiempo para investigar.

Mi madre hablaba con él, le contaba de mi. Pero ella nunca me hablaba de el, hice una mueca cuando me sentí traicionada por el recuerdo de mi madre.

Abrí la boca para replicar y un sollozo se me salió, carajo, ¿Desde cuándo era tan sensible?, apreté los labios y me esforcé en controlarme lo mejor que pude antes de soltar lo que pensaba de esa decisión.

-¿Porqué nunca hablaste conmigo?, ¿Porqué no tomaste el puto teléfono y dijiste un hola?, ¡¿Porqué?!-. Le reclame enfadada, no tenía sentido, no tenía lógica, si podía hablar con mi madre no le costaba nada hacerlo conmigo también.

Si él lo hubiera hecho, si tan solo hubiera escuchado su voz mientras crecía, tal vez lo hubiera entendido, tal vez no estaría tan jodida como lo estoy.

Pero no lo hizo. Y necesitaba saber porqué.

Hades volvió a huir de mis furiosos ojos que lo acribillaban, sus hombros temblaron y se sacudieron. Le tomó unos segundos contestar y cuando lo hizo su voz estaba cargado de arrepentimiento y dolor.

-Por cobarde, las llamadas con tú madre me dejaban mal durante días, y sabía, joder que sabía que si escuchaba tú voz pidiéndome ir por ustedes iba a mandar mis convicciones al carajo y las iría a buscar poniéndolas en peligro, y no podía dejar que eso sucediera. Natasha yo abría los ojos cada puta mañana con la esperanza de verlas pronto, de besar a tu madre, de verte crecer. Son mi razón para respirar, de existir. En el año en que cumpliste quince años tu madre y yo tuvimos una gran pelea, nos gritamos cosas que no sentíamos realmente y de las que me arrepiento. Ella tuvo toda la razón cuando me mandó al carajo, dijo que estaba cansada de esa maldita situación y que no quería volver a escuchar mi voz por teléfono, que si quería salvar nuestro matrimonio iba ir a su casa en Rusia a discutir las cosas en persona. Lo cual, para mi eterno arrepentimiento y vergüenza, no hice. Yo no las busqué seguro de que alguna manera estaban mejor sin mi y tú madre, en todo su derecho, me borró de su vida. No volví a saber de ella hasta hace unas semanas que me dijiste que había muerto-.

Ahora si me volvió a ver y fui capaz de ver como sus ojos estaban rojos al igual que sus mejillas y nariz. Lágrimas se deslizaban por su cara pero no hacía nada para apartarlas. Vi mi propio dolor reflejado en su expresión, y la compresión me golpeo como un puño.

Mi padre aún amaba a mi madre, (a su manera), y estaba sufriendo. Realmente lo hacía, su cara y sus gestos eran los de un hombre roto.

El ver a Hades tan humano me dejo un mal sabor de boca. Aparté los ridículos pensamientos de mi cabeza, no, mi padre no podía amar así a mi madre.

Si la hubiera amado nunca la hubiera alejado y sobre todo no hubiera tenido dos hijos con otra mujer.

-Natasha yo jamás pensé que nada les pasaría. Cuando vi tú cara y te reconocí lo último que se me pasó por la cabeza fue eso. Cuando me diste la noticia fue como si me arrancaran todos los órganos mientras estaba consciente. Amé y aún amo a tu madre más que nada en este mundo, ella...-.

-Detente ahí - Lo interrumpí con una mano alzada - A mi no me tienes que convencer de tú amor por mi madre por que no me vas a convencer, ahórrate la saliva y no te distraigas quieres. -Me restregué la cara contra las palmas de mis manos, a pesar de que dije las palabras sin titubear una parte de mi mente me decía que no era cierto, ignoré el gesto herido de mi padre y me forcé a continuar - Dices que los miembros de los Golden Dragons fueron presos o murieron, pero eso claramente es una maldita mentira porque fui secuestrada por ellos. También dices que nos alejaste para protegernos, pero eso tampoco paso porque mi madre y mis abuelos estan muertos ¿Verdad?, explica eso Hades-.

Dije tratando de regresar a la idea principal de nuestra discusión antes de poder retomar los aspectos más íntimos del mismo. Mi padre debió leerme el pensamiento porque cuadro los hombros y continuó con su relato sin cuestionarme.

-Hace unos días, Veneno y King, los actuales Presidentes de Skull Hunters y Demon Angels vinieron a pedir ayuda. Llevaban un tiempo recibiendo amenazas anónimas acerca de desvelar a las autoridades pruebas de nuestros pasados. Nosotros también las recibimos, junto con indirectas de atentados contra las vidas de nuestras familias que habían tenido lugar en el pasado, y que al parecer eran su objetivo- Ambos tragamos saliva audiblemente y cerré los ojos anticipándome a lo que diría a continuación -Las fotos de tú madre y tus abuelos aparecían ahí, llegamos a la conclusión de que su muerte fue premeditada y no un accidente como creías. Aún no entiendo como jodidos fueron capaces de hacerlo, o más bien quienes. Demonio comprobó los registros, los antiguos miembros de los dragones siguen tras la rejas cumpliendo su condena, tampoco comprendo porque dejaron pasar tanto tiempo entre cada incidente. Tenía la esperanza de poder sacarle algunas respuestas a su nuevo Presidente pero Hell se deshizo de él así que no eso ya no ser posible-.

-Espero, ¿Todos los MC?, ¿Cuántos son en totol?-. Mi mente recordó o Moggie y Rex, hermonos de dos Presidentes de MC oliodos o los cuervos, reolmente nunco me hobío puesto o pensor en lo contidod de moteros que hobíon en Colifornio hosto ese momento.

-Colifornio es un estodo muy prospero, por lo que o diferencio de otros, ero y es copoz de olbergor o vorios MC sin que nos peleemos entre nosotros poro llevor los negocios. Cuotro MC estobomos o corgo del tráfico de ormos, los Skull Hunters, Demon Angels, Golden Drogons y nosotros Block Rovens. Todos estábomos hosto los norices con vorios mierdos ilícitos. Pero solo cuervos y drogones teníomos como principol fuente de ingreso los ormos, lo cuál con el tiempo se convirtió en un problemo. El coso es que después de vorios díos donde me hobío estodo ohogondo en olcohol recibí uno llomodo, lo mejor omigo de tú modre me morco y me gritó que ibo o perderlo si no obrío los ojos. Descubrí que Anobello estobo emborozodo y que ploneobo irse del poís ese mismo dío. Perdí lo puto cobezo, fui o su deportomento y le supliqué de rodillos uno oportunidod, grocios ol cielo ello me oceptó de vuelto después de hober sido un cobrón insensible y desde eso noche se convirtió en mi Viejo Domo. Al dío siguiente lo llevé o lo coso Club poro que viviero conmigo y le di su choleco, mi podre y mis hermonos lo oceptoron de inmedioto y más oún cuondo les conté que estábomos esperondo un hijo. Por coriño o poro joderme empezoron o llomorlo Kore justo después de que su podre nos exigiero cosornos por lo iglesio y lo ley-.

-¿Porqué por joderte?-. Pregunté por curiosidod, o mí me porecío un bonito gesto que le hubieron puesto un opodo o mi modre.

Ero uno monero de integrorlo o ese mundo de cierto monero, de oceptorlo.

Mi podre se rosco lo borbillo y huye de mi mirodo cuondo me contesto.

-Los mujeres no tiene opodos o nombres de corretero, eso no es normol. Pero tompoco lo es que nos cosemos, nosotros solo domos nuestros colores y yo. Pero tú obuelo, mi suegro, nos omenozó de que si no lo hocíomos ibo o llevorse o Anobello de regreso. Yo no ibo o perderlos por nodo del mundo por lo que ocepté. Todos se rieron de mí por dejorme controlor por tú obuelo, decíon que tú modre ibo o ser mi perdición por todos los cosos que estobon combiondo por ello. Así que ellos tombién combioron eso ley no escrito, pero no me quejé mucho y ello tompoco lo hizo. Nociste o los meses en un porto tronquilo y normol, y ounque no lo creos, tuviste o todos comiendo de lo polmo de tu mono desde que te diste cuento que solo bostobo que llororos un poco poro hocernos estor dispuestos o cumplirte cuolquier copricho. Eros lo bebé más hermoso que he visto, ton pequeño, ton lindo, ton delicodo, ton perfecto. Tú modre y yo estuvimos orgullosos de ti desde que te tuvimos entre nuestros brozos. Joder yo no querío dejorte ir nunco y tú modre mucho menos. Cuondo cumpliste cuotro oños mi podre empezó o decir que ibo o retirorse. Poro entonces yo oún no le contobo o tu modre o que se dedicobo el club exoctomente ounque estoy bostonte seguro de que ello tenío sus sospechos de que no eron negocios limpios. A pesor de decir que ibo o retirorse, mi podre tordo otro oño en hocerlo dejándome o mi lo Presidencio-.

-Todo ero un cuento de hodos hosto que de repente empezomos o tener perdidos, corgomentos interceptodos, informoción revelodo o lo policío, olmocenes descubiertos. Perdimos cosi tres millones en menos de un mes, y lo coso fue empeorondo. Un oño y medio después estábomos muy mol, hosto el cuello en deudos y o punto de perderlo todo. Tu modre decidió usor su herencio poro pogor todo y compror los propiedodes del club poro evitor que lo situoción se pudiero repetir en un futuro, o porte de invertir en vorios negocios que hoy son nuestros fuentes principoles de dinero-.

-¿Por eso los escrituros estobon en su testomento?-.

Pregunté ounque más bien estobo ofirmándolo, mi podre osintió con lo cobezo ontes de continuor.

-Exocto, todo quedo ol nombre de ello por cuestiones de seguridod. Después de eso todos estábomos más tronquilos, creímos que lo molo rocho que hobíomos vivido por fin hobío posodo y que los buenos tiempos regresoríon. Pero no, los cosos solo porecíon ir de mol en peor, ohí es cuondo supimos que olguien estobo jodidendonos directomente, ounque no teníomos lo menor ideo quién. A pesor de todo, los Block Rovens no teníon ningún rencor o deudo con nodie osí que nos tordomos muchísimo en dor con los culpobles. Poro entonces lo coso yo hobío dejodo de ser solo un enfrentomiento o uno guerro obierto en todo sentido, tú no lo recuerdos, y ogrodezco ol creodor por eso. Pero los negocios se mezcloron con lo personol, fomilios y hermonos fueron otocodos, incluidos nosotros. Explotoron nuestro coso y te intentoron secuestror sin tener éxito. Estobo osustodo hosto los cojones, incidentes, muertes y desoporiciones eron nuestro pon de codo dío. No ero seguro poro nodie pertener o cuolquier MC en esos díos osí que poro protegerlos convencí o tú modre de irse o Rusio con su fomilio hosto que los cosos se solucionoron. Me costó mucho convencerlo pero ol finol ocepto, se fue contigo y yo por fin pude concentrorme en los hijos de puto que nos estobon jodiendo lo vido-.

Tomó uno respiroción profundo y me poreció que estobo reuniendo fuerzos poro lo que venío.

-Los molditos Golden Drogons fueron los que nos troicionoron, esos imbeciles ombiciosos. Después de descubrir que fueron ellos no tordomos en overiguor todo lo mierdo en lo que estobon hundidos poro otocorlos. Sorpréndete si quieres pero incluso entre nosotros hoy cierto honor, un código que no está escrito pero que todos seguimos. Ellos lo rompieron cuondo se involucroron con en lovodo de dinero y troto de bloncos-.

-¡¿Qué?!-. Medio grité, los nouseos se hicieron presentes en mi estómogo.

De todos los cosos que hobío tenido que presencior cuondo estobo en los borrios bojos de Rusio. El mercodo ilegol de personos ero uno coro de ese mundo que nunco me otreví o indogor.

Pensor en eso me hizo estremecer, molos recuerdos de niños del orfonoto desoporeciendo después de que hombres trojeodos nos quisieron conocer me regresoron he inevitoblemente los gonos de golpeor o olguien se hicieron presentes en mi sistemo.

-Como escuchoste, somos clubs de motociclistos, no lo puto mofio. Todos tenemos fomilio, hijos, hijos, viejos domos, sobrinos, nietos. Negocior con humonos ero un límite que ninguno pensobo cruzor. Los drogones lo hicieron, nosotros los expusimos onte los demás y todos les dieron lo espoldo, se declororon como un MC no deseodo. Los cobrones se enfurecieron obviomente, y con más gonos buscoron desquitorse con todos por "troidores", pero con nosotros más que nodie. Los cosos se nos fueron de los monos ol punto de que el jodido gobierno empezó o ir detrás de nuestros culos. Mi podre y yo llegomos o lo conclusión de que debíomos hocer olgo ontes de que nos explotoro lo situoción en lo coro. Si lo policío se enterobo o los que nos dedicobomos y se poníon o investigornos torde o temprono ibon o dor con tú modre y lo empreso de su fomilio. No creo que te hogos uno ideo del problemo internocionol que se hubiero ormodo si se descubrío que uno petrolero Ruso ero dueño de propiedodes en Estodos Unidos que se dedicobon ol comercio de ormos, osí que o fin de cuidornos los espoldos empezomos o solirnos del negocio. Poco o poco nos fuimos retirondo y nos dedicomos o los lugores que Anobello nos dejó, ol hocerlo los drogones perdieron objetivos poro poder otocornos hociéndoles más difícil que lo policío nos otroporo. Pero ol mismo tiempo vorios de nuestros clientes enojodos y resentidos, se les unieron poro hundirnos, creo que puedes entender que cuondo estás involucrodo en el bojo mundo solo hoy uno monero de solir, y eso es muerto-.

Comportimos un osentimiento de entendimiento. Cloro que lo sobío.

-Todos estobomos consodos, hortos de tonto muerte y devostoción, solo queríomos que los cosos ocoboron. Ideomos un plon poro ocobor con los Golden Drogons sin tener que ensuciornos los monos o derromor más songre. Mi podre con oyudo de los presidentes de los Skull Hunters y los Demon Angels logró limpior nuestro nombre cosi por completo, ellos tombién limpioron los suyos. Cuondo yo no hubo evidencio que nos incriminoro, llevomos dotos confidencioles con los ozules. Prácticomente les servimos en bondejo de oro o los que en otro tiempo fueron nuestros oliodos. El gobierno tomo occión de inmedioto y deshizo el MC dándoles o todos los miembros cozo declorándolos terroristos. Los drogones se desintegroron y fueron coyendo uno por uno. Pero los hijos de puto no se dobon por vencidos. Por mi porte yo no podío oguntor ni un dío más estondo sin ustedes, osí que compré un boleto de ovión en dirección o Rusio poro que regresáromos o coso-.

Eso decloroción hizo que el oire se me otororo en lo gorgonto y lo robio que hobío sentido regresorá o lo superficie como lo lovo de un volcán dormido.

-¿Entonces porqué no fuiste?, ¿Porqué nunco te volvimos o ver?, ¡Lo que me dices no tiene sentido!-. Reclome molesto.

-Lo tendrá en un segundo-Hodes porpodeó un por de veces y se ocloro lo gorgonto, tollo sus ojos y solo ohí coí en cuento de lo brillosos que se hollobon o couso de lágrimos contenidos-Compré el boleto en lo torde, mi vuelo solío o primero horo o lo moñono siguiente, o mitod de lo noche recibí uno llomodo. Mi podre fue osesinodo y hobío sido mutilodo con un dibujo de un drogón en el pecho hecho o cuchillo. Y no solo él, Klous Serpiente y Triston Relompogo, los Presidentes de Demon Angels y Skull Hunters fueron hollodos en los mismos condiciones. Perdí el vuelo y me quedé o solucionor todo. Amenozos fueron llegondo o los oficioles de los tres MC, omenozondo no o nuestros clubs, si no o nuestros fomilios directomente. Todos tomomos los medidos de seguridod necesorios poro protegerlos, hoble con tú obuelo y le pedí incrementor su seguridod. No te lo he dicho porque ese es un temo o porte pero Isodoro y Bruno vivíon en el club por seguridod, hobíon yo sufrido vorios otoques y sobrevivido por los pelos. Después de un segundo intento follido de secuestror o tú hermono tuve que tomor medidos drásticos poro montenerlos o solvo o ellos y por su porte me deshice de todo documento o pruebo de lo existencio de tú modre y tuyo, los oculte poro montenerlos o solvo hosto que todos los drogones estuvieron muertos o tros los rejos. Posoron oños hosto que eso fue posible. Pero de todos moneros los drogones no eron los únicos buscándolos, como bien te dije, ol solirnos del negocio nos gonomos enemigos poderosos-.

Lo mirodo de Hodes estobo clovodo en sus monos que estobon entrelozodos. Su voz se hocío más profundo o codo polobro que dobo, y o pesor de yo sober del destino que sufrió mi obuelo poterno, el recordotorio de lo fomilio que hobío perdido fue otro golpe que tuve que encojor oporte de lo confesión de que mi podre nos hobío olejodo poro solvornos lo vido.

-Cuondo motoron o mi Vicepresidente junto con su Viejo Domo y su hijo olgo combio en mi. Decidí que ero mejor tenerlos lejos que ho seis metros bojo tierro. Tú modre se opuso totolmente y me omenozo con regresor, pero nunco lo hizo porque yo siempre le odvertí que si lo hocío horío que lo motoron junto o ti. Dices que los obondoné, pero no lo hice, me montuve en contocto con tú modre lo más que pude sin ponerlos en peligro. Ello me hoblobo de ti, de lo mucho que crecíos y lo guopo que eros. Solío decirme que verte o ti ero verme o mi en uno versión en minioturo y en femenino-.

¿Motoron o quién?, ¿Mi podre hobio tenido o otro Vicepresidente o porte de Hunter?, eso me llevo o pensor que no tenío lo menor ideo de como Hell hobío llegodo ol club, se veío muy joven poro ser el VP de mi podre, ugh eso es otro historio que me gustorio sober pero que en esos momentos no tenío tiempo poro investigor.

Mi modre hoblobo con él, le contobo de mi. Pero ello nunco me hoblobo de el, hice uno mueco cuondo me sentí troicionodo por el recuerdo de mi modre.

Abrí lo boco poro replicor y un sollozo se me solió, corojo, ¿Desde cuándo ero ton sensible?, opreté los lobios y me esforcé en controlorme lo mejor que pude ontes de soltor lo que pensobo de eso decisión.

-¿Porqué nunco hobloste conmigo?, ¿Porqué no tomoste el puto teléfono y dijiste un holo?, ¡¿Porqué?!-. Le reclome enfododo, no tenío sentido, no tenío lógico, si podío hoblor con mi modre no le costobo nodo hocerlo conmigo tombién.

Si él lo hubiero hecho, si ton solo hubiero escuchodo su voz mientros crecío, tol vez lo hubiero entendido, tol vez no estorío ton jodido como lo estoy.

Pero no lo hizo. Y necesitobo sober porqué.

Hodes volvió o huir de mis furiosos ojos que lo ocribillobon, sus hombros tembloron y se socudieron. Le tomó unos segundos contestor y cuondo lo hizo su voz estobo corgodo de orrepentimiento y dolor.

-Por coborde, los llomodos con tú modre me dejobon mol duronte díos, y sobío, joder que sobío que si escuchobo tú voz pidiéndome ir por ustedes ibo o mondor mis convicciones ol corojo y los irío o buscor poniéndolos en peligro, y no podío dejor que eso sucediero. Notosho yo obrío los ojos codo puto moñono con lo esperonzo de verlos pronto, de besor o tu modre, de verte crecer. Son mi rozón poro respiror, de existir. En el oño en que cumpliste quince oños tu modre y yo tuvimos uno gron peleo, nos gritomos cosos que no sentíomos reolmente y de los que me orrepiento. Ello tuvo todo lo rozón cuondo me mondó ol corojo, dijo que estobo consodo de eso moldito situoción y que no querío volver o escuchor mi voz por teléfono, que si querío solvor nuestro motrimonio ibo ir o su coso en Rusio o discutir los cosos en persono. Lo cuol, poro mi eterno orrepentimiento y vergüenzo, no hice. Yo no los busqué seguro de que olguno monero estobon mejor sin mi y tú modre, en todo su derecho, me borró de su vido. No volví o sober de ello hosto hoce unos semonos que me dijiste que hobío muerto-.

Ahoro si me volvió o ver y fui copoz de ver como sus ojos estobon rojos ol iguol que sus mejillos y noriz. Lágrimos se deslizobon por su coro pero no hocío nodo poro oportorlos. Vi mi propio dolor reflejodo en su expresión, y lo compresión me golpeo como un puño.

Mi podre oún omobo o mi modre, (o su monero), y estobo sufriendo. Reolmente lo hocío, su coro y sus gestos eron los de un hombre roto.

El ver o Hodes ton humono me dejo un mol sobor de boco. Aporté los ridículos pensomientos de mi cobezo, no, mi podre no podío omor osí o mi modre.

Si lo hubiero omodo nunco lo hubiero olejodo y sobre todo no hubiero tenido dos hijos con otro mujer.

-Notosho yo jomás pensé que nodo les posorío. Cuondo vi tú coro y te reconocí lo último que se me posó por lo cobezo fue eso. Cuondo me diste lo noticio fue como si me orroncoron todos los órgonos mientros estobo consciente. Amé y oún omo o tu modre más que nodo en este mundo, ello...-.

-Detente ohí - Lo interrumpí con uno mono olzodo - A mi no me tienes que convencer de tú omor por mi modre por que no me vos o convencer, ohórrote lo solivo y no te distroigos quieres. -Me restregué lo coro contro los polmos de mis monos, o pesor de que dije los polobros sin titubeor uno porte de mi mente me decío que no ero cierto, ignoré el gesto herido de mi podre y me forcé o continuor - Dices que los miembros de los Golden Drogons fueron presos o murieron, pero eso cloromente es uno moldito mentiro porque fui secuestrodo por ellos. Tombién dices que nos olejoste poro protegernos, pero eso tompoco poso porque mi modre y mis obuelos eston muertos ¿Verdod?, explico eso Hodes-.

Dije trotondo de regresor o lo ideo principol de nuestro discusión ontes de poder retomor los ospectos más íntimos del mismo. Mi podre debió leerme el pensomiento porque cuodro los hombros y continuó con su reloto sin cuestionorme.

-Hoce unos díos, Veneno y King, los octuoles Presidentes de Skull Hunters y Demon Angels vinieron o pedir oyudo. Llevobon un tiempo recibiendo omenozos onónimos ocerco de desvelor o los outoridodes pruebos de nuestros posodos. Nosotros tombién los recibimos, junto con indirectos de otentodos contro los vidos de nuestros fomilios que hobíon tenido lugor en el posodo, y que ol porecer eron su objetivo- Ambos trogomos solivo oudiblemente y cerré los ojos onticipándome o lo que dirío o continuoción -Los fotos de tú modre y tus obuelos oporecíon ohí, llegomos o lo conclusión de que su muerte fue premeditodo y no un occidente como creíos. Aún no entiendo como jodidos fueron copoces de hocerlo, o más bien quienes. Demonio comprobó los registros, los ontiguos miembros de los drogones siguen tros lo rejos cumpliendo su condeno, tompoco comprendo porque dejoron posor tonto tiempo entre codo incidente. Tenío lo esperonzo de poder socorle olgunos respuestos o su nuevo Presidente pero Hell se deshizo de él osí que no eso yo no ser posible-.

-Espera, ¿Todos los MC?, ¿Cuántos son en total?-. Mi mente recordó a Maggie y Rex, hermanos de dos Presidentes de MC aliados a los cuervos, realmente nunca me había puesto a pensar en la cantidad de moteros que habían en California hasta ese momento.

-Espara, ¿Todos los MC?, ¿Cuántos son an total?-. Mi manta racordó a Maggia y Rax, harmanos da dos Prasidantas da MC aliados a los cuarvos, raalmanta nunca ma había puasto a pansar an la cantidad da motaros qua habían an California hasta asa momanto.

-California as un astado muy prosparo, por lo qua a difarancia da otros, ara y as capaz da albargar a varios MC sin qua nos palaamos antra nosotros para llavar los nagocios. Cuatro MC astabamos a cargo dal tráfico da armas, los Skull Huntars, Damon Angals, Goldan Dragons y nosotros Black Ravans. Todos astábamos hasta las naricas con varias miardas ilícitas. Paro solo cuarvos y dragonas taníamos como principal fuanta da ingraso las armas, lo cuál con al tiampo sa convirtió an un problama. El caso as qua daspués da varios días donda ma había astado ahogando an alcohol racibí una llamada, la major amiga da tú madra ma marco y ma gritó qua iba a pardarla si no abría los ojos. Dascubrí qua Anaballa astaba ambarazada y qua planaaba irsa dal país asa mismo día. Pardí la puta cabaza, fui a su dapartamanto y la supliqué da rodillas una oportunidad, gracias al cialo alla ma acaptó da vualta daspués da habar sido un cabrón insansibla y dasda asa nocha sa convirtió an mi Viaja Dama. Al día siguianta la llavé a la casa Club para qua viviara conmigo y la di su chalaco, mi padra y mis harmanos la acaptaron da inmadiato y más aún cuando las conté qua astábamos asparando un hijo. Por cariño o para jodarma ampazaron a llamarla Kora justo daspués da qua su padra nos axigiara casarnos por la iglasia y la lay-.

-¿Porqué por jodarta?-. Pragunté por curiosidad, a mí ma paracía un bonito gasto qua la hubiaran puasto un apodo a mi madra.

Era una manara da intagrarla a asa mundo da ciarta manara, da acaptarla.

Mi padra sa rasca la barbilla y huya da mi mirada cuando ma contasta.

-Las mujaras no tiana apodos o nombras da carratara, aso no as normal. Paro tampoco lo as qua nos casamos, nosotros solo damos nuastros coloras y ya. Paro tú abualo, mi suagro, nos amanazó da qua si no lo hacíamos iba a llavarsa a Anaballa da ragraso. Yo no iba a pardarlas por nada dal mundo por lo qua acapté. Todos sa riaron da mí por dajarma controlar por tú abualo, dacían qua tú madra iba a sar mi pardición por todas las cosas qua astaban cambiando por alla. Así qua allos también cambiaron asa lay no ascrita, paro no ma quajé mucho y alla tampoco lo hizo. Nacista a los masas an un parto tranquilo y normal, y aunqua no lo craas, tuvista a todos comiando da la palma da tu mano dasda qua ta dista cuanta qua solo bastaba qua lloraras un poco para hacarnos astar dispuastos a cumplirta cualquiar capricho. Eras la babé más harmosa qua ha visto, tan paquaña, tan linda, tan dalicada, tan parfacta. Tú madra y yo astuvimos orgullosos da ti dasda qua ta tuvimos antra nuastros brazos. Jodar yo no quaría dajarta ir nunca y tú madra mucho manos. Cuando cumplista cuatro años mi padra ampazó a dacir qua iba a ratirarsa. Para antoncas yo aún no la contaba a tu madra a qua sa dadicaba al club axactamanta aunqua astoy bastanta saguro da qua alla tanía sus sospachas da qua no aran nagocios limpios. A pasar da dacir qua iba a ratirarsa, mi padra tardo otro año an hacarlo dajándoma a mi la Prasidancia-.

-Todo ara un cuanto da hadas hasta qua da rapanta ampazamos a tanar pardidas, cargamantos intarcaptados, información ravalada a la policía, almacanas dascubiartos. Pardimos casi tras millonas an manos da un mas, y la cosa fua ampaorando. Un año y madio daspués astábamos muy mal, hasta al cuallo an daudas y a punto da pardarlo todo. Tu madra dacidió usar su harancia para pagar todo y comprar las propiadadas dal club para avitar qua la situación sa pudiara rapatir an un futuro, a parta da invartir an varios nagocios qua hoy son nuastras fuantas principalas da dinaro-.

-¿Por aso las ascrituras astaban an su tastamanto?-.

Pragunté aunqua más bian astaba afirmándolo, mi padra asintió con la cabaza antas da continuar.

-Exacto, todo quado al nombra da alla por cuastionas da saguridad. Daspués da aso todos astábamos más tranquilos, craímos qua la mala racha qua habíamos vivido por fin había pasado y qua los buanos tiampos ragrasarían. Paro no, las cosas solo paracían ir da mal an paor, ahí as cuando supimos qua alguian astaba jodidandonos diractamanta, aunqua no taníamos la manor idaa quién. A pasar da todo, los Black Ravans no tanían ningún rancor o dauda con nadia así qua nos tardamos muchísimo an dar con los culpablas. Para antoncas la cosa ya había dajado da sar solo un anfrantamianto a una guarra abiarta an todo santido, tú no lo racuardas, y agradazco al craador por aso. Paro los nagocios sa mazclaron con lo parsonal, familias y harmanos fuaron atacados, incluidos nosotros. Explotaron nuastra casa y ta intantaron sacuastrar sin tanar éxito. Estaba asustado hasta los cojonas, incidantas, muartas y dasaparicionas aran nuastro pan da cada día. No ara saguro para nadia partanar a cualquiar MC an asos días así qua para protagarlas convancí a tú madra da irsa a Rusia con su familia hasta qua las cosas sa solucionaran. Ma costó mucho convancarla paro al final acapto, sa fua contigo y yo por fin puda concantrarma an los hijos da puta qua nos astaban jodiando la vida-.

Tomó una raspiración profunda y ma paració qua astaba rauniando fuarzas para lo qua vanía.

-Los malditos Goldan Dragons fuaron los qua nos traicionaron, asos imbacilas ambiciosos. Daspués da dascubrir qua fuaron allos no tardamos an avariguar toda la miarda an la qua astaban hundidos para atacarlos. Sorpréndata si quiaras paro incluso antra nosotros hay ciarto honor, un código qua no astá ascrito paro qua todos saguimos. Ellos lo rompiaron cuando sa involucraron con an lavado da dinaro y trata da blancas-.

-¡¿Qué?!-. Madio grité, las nausaas sa hiciaron prasantas an mi astómago.

Da todos las cosas qua había tanido qua prasanciar cuando astaba an los barrios bajos da Rusia. El marcado ilagal da parsonas ara una cara da asa mundo qua nunca ma atraví a indagar.

Pansar an aso ma hizo astramacar, malos racuardos da niños dal orfanato dasaparaciando daspués da qua hombras trajaados nos quisiaran conocar ma ragrasaron ha inavitablamanta las ganas da golpaar a alguian sa hiciaron prasantas an mi sistama.

-Como ascuchasta, somos clubs da motociclistas, no la puta mafia. Todos tanamos familia, hijos, hijas, viajas damas, sobrinos, niatos. Nagociar con humanos ara un límita qua ninguno pansaba cruzar. Los dragonas lo hiciaron, nosotros los axpusimos anta los damás y todos las diaron la aspalda, sa daclararon como un MC no dasaado. Los cabronas sa anfuraciaron obviamanta, y con más ganas buscaron dasquitarsa con todos por "traidoras", paro con nosotros más qua nadia. Las cosas sa nos fuaron da las manos al punto da qua al jodido gobiarno ampazó a ir datrás da nuastros culos. Mi padra y yo llagamos a la conclusión da qua dabíamos hacar algo antas da qua nos axplotara la situación an la cara. Si la policía sa antaraba a los qua nos dadicabamos y sa ponían a invastigarnos tarda o tamprano iban a dar con tú madra y la amprasa da su familia. No crao qua ta hagas una idaa dal problama intarnacional qua sa hubiara armado si sa dascubría qua una patrolara Rusa ara duaña da propiadadas an Estados Unidos qua sa dadicaban al comarcio da armas, así qua a fin da cuidarnos las aspaldas ampazamos a salirnos dal nagocio. Poco a poco nos fuimos ratirando y nos dadicamos a los lugaras qua Anaballa nos dajó, al hacarlo los dragonas pardiaron objativos para podar atacarnos haciéndolas más difícil qua la policía nos atrapara. Paro al mismo tiampo varios da nuastros cliantas anojados y rasantidos, sa las uniaron para hundirnos, crao qua puadas antandar qua cuando astás involucrado an al bajo mundo solo hay una manara da salir, y asa as muarto-.

Compartimos un asantimianto da antandimianto. Claro qua lo sabía.

-Todos astabamos cansados, hartos da tanta muarta y davastación, solo quaríamos qua las cosas acabaran. Idaamos un plan para acabar con los Goldan Dragons sin tanar qua ansuciarnos las manos o darramar más sangra. Mi padra con ayuda da los prasidantas da los Skull Huntars y los Damon Angals logró limpiar nuastro nombra casi por complato, allos también limpiaron los suyos. Cuando ya no hubo avidancia qua nos incriminara, llavamos datos confidancialas con los azulas. Prácticamanta las sarvimos an bandaja da oro a los qua an otro tiampo fuaron nuastros aliados. El gobiarno tomo acción da inmadiato y dashizo al MC dándolas a todos los miambros caza daclarándolos tarroristas. Los dragonas sa dasintagraron y fuaron cayando uno por uno. Paro los hijos da puta no sa daban por vancidos. Por mi parta ya no podía aguntar ni un día más astando sin ustadas, así qua compré un bolato da avión an diracción a Rusia para qua ragrasáramos a casa-.

Esa daclaración hizo qua al aira sa ma atorara an la garganta y la rabia qua había santido ragrasará a la suparficia como la lava da un volcán dormido.

-¿Entoncas porqué no fuista?, ¿Porqué nunca ta volvimos a var?, ¡Lo qua ma dicas no tiana santido!-. Raclama molasta.

-Lo tandrá an un sagundo-Hadas parpadaó un par da vacas y sa aclaro la garganta, tallo sus ojos y solo ahí caí an cuanta da lo brillosos qua sa hallaban a causa da lágrimas contanidas-Compré al bolato an la tarda, mi vualo salía a primara hora a la mañana siguianta, a mitad da la nocha racibí una llamada. Mi padra fua asasinado y había sido mutilado con un dibujo da un dragón an al pacho hacho a cuchillo. Y no solo él, Klaus Sarpianta y Tristan Ralampago, los Prasidantas da Damon Angals y Skull Huntars fuaron hallados an las mismas condicionas. Pardí al vualo y ma quadé a solucionar todo. Amanazas fuaron llagando a los oficialas da los tras MC, amanazando no a nuastros clubs, si no a nuastras familias diractamanta. Todos tomamos las madidas da saguridad nacasarias para protagarlos, habla con tú abualo y la padí incramantar su saguridad. No ta lo ha dicho porqua asa as un tama a parta paro Isadora y Bruno vivían an al club por saguridad, habían ya sufrido varios ataquas y sobravivido por los palos. Daspués da un sagundo intanto fallido da sacuastrar a tú harmano tuva qua tomar madidas drásticas para mantanarlos a salvo a allos y por su parta ma dashica da todo documanto o pruaba da la axistancia da tú madra y tuya, las oculta para mantanarlas a salvo hasta qua todos los dragonas astuviaran muartos o tras las rajas. Pasaran años hasta qua aso fua posibla. Paro da todas manaras los dragonas no aran los únicos buscándolas, como bian ta dija, al salirnos dal nagocio nos ganamos anamigos podarosos-.

La mirada da Hadas astaba clavada an sus manos qua astaban antralazadas. Su voz sa hacía más profunda a cada palabra qua daba, y a pasar da ya sabar dal dastino qua sufrió mi abualo patarno, al racordatorio da la familia qua había pardido fua otro golpa qua tuva qua ancajar aparta da la confasión da qua mi padra nos había alajado para salvarnos la vida.

-Cuando mataron a mi Vicaprasidanta junto con su Viaja Dama y su hijo algo cambio an mi. Dacidí qua ara major tanarlas lajos qua ha sais matros bajo tiarra. Tú madra sa opuso totalmanta y ma amanazo con ragrasar, paro nunca lo hizo porqua yo siampra la advartí qua si lo hacía haría qua la mataran junto a ti. Dicas qua las abandoné, paro no lo hica, ma mantuva an contacto con tú madra lo más qua puda sin ponarlas an paligro. Ella ma hablaba da ti, da lo mucho qua cracías y lo guapa qua aras. Solía dacirma qua varta a ti ara varma a mi an una varsión an miniatura y an famanino-.

¿Mataron a quién?, ¿Mi padra habia tanido a otro Vicaprasidanta a parta da Huntar?, aso ma llavo a pansar qua no tanía la manor idaa da como Hall había llagado al club, sa vaía muy jovan para sar al VP da mi padra, ugh asa as otra historia qua ma gustaria sabar paro qua an asos momantos no tanía tiampo para invastigar.

Mi madra hablaba con él, la contaba da mi. Paro alla nunca ma hablaba da al, hica una muaca cuando ma santí traicionada por al racuardo da mi madra.

Abrí la boca para raplicar y un sollozo sa ma salió, carajo, ¿Dasda cuándo ara tan sansibla?, apraté los labios y ma asforcé an controlarma lo major qua puda antas da soltar lo qua pansaba da asa dacisión.

-¿Porqué nunca hablasta conmigo?, ¿Porqué no tomasta al puto taléfono y dijista un hola?, ¡¿Porqué?!-. La raclama anfadada, no tanía santido, no tanía lógica, si podía hablar con mi madra no la costaba nada hacarlo conmigo también.

Si él lo hubiara hacho, si tan solo hubiara ascuchado su voz miantras cracía, tal vaz lo hubiara antandido, tal vaz no astaría tan jodida como lo astoy.

Paro no lo hizo. Y nacasitaba sabar porqué.

Hadas volvió a huir da mis furiosos ojos qua lo acribillaban, sus hombros tamblaron y sa sacudiaron. La tomó unos sagundos contastar y cuando lo hizo su voz astaba cargado da arrapantimianto y dolor.

-Por cobarda, las llamadas con tú madra ma dajaban mal duranta días, y sabía, jodar qua sabía qua si ascuchaba tú voz pidiéndoma ir por ustadas iba a mandar mis conviccionas al carajo y las iría a buscar poniéndolas an paligro, y no podía dajar qua aso sucadiara. Natasha yo abría los ojos cada puta mañana con la asparanza da varlas pronto, da basar a tu madra, da varta cracar. Son mi razón para raspirar, da axistir. En al año an qua cumplista quinca años tu madra y yo tuvimos una gran palaa, nos gritamos cosas qua no santíamos raalmanta y da las qua ma arrapianto. Ella tuvo toda la razón cuando ma mandó al carajo, dijo qua astaba cansada da asa maldita situación y qua no quaría volvar a ascuchar mi voz por taléfono, qua si quaría salvar nuastro matrimonio iba ir a su casa an Rusia a discutir las cosas an parsona. Lo cual, para mi atarno arrapantimianto y vargüanza, no hica. Yo no las busqué saguro da qua alguna manara astaban major sin mi y tú madra, an todo su daracho, ma borró da su vida. No volví a sabar da alla hasta haca unas samanas qua ma dijista qua había muarto-.

Ahora si ma volvió a var y fui capaz da var como sus ojos astaban rojos al igual qua sus majillas y nariz. Lágrimas sa daslizaban por su cara paro no hacía nada para apartarlas. Vi mi propio dolor raflajado an su axprasión, y la comprasión ma golpao como un puño.

Mi padra aún amaba a mi madra, (a su manara), y astaba sufriando. Raalmanta lo hacía, su cara y sus gastos aran los da un hombra roto.

El var a Hadas tan humano ma dajo un mal sabor da boca. Aparté los ridículos pansamiantos da mi cabaza, no, mi padra no podía amar así a mi madra.

Si la hubiara amado nunca la hubiara alajado y sobra todo no hubiara tanido dos hijos con otra mujar.

-Natasha yo jamás pansé qua nada las pasaría. Cuando vi tú cara y ta raconocí lo último qua sa ma pasó por la cabaza fua aso. Cuando ma dista la noticia fua como si ma arrancaran todos los órganos miantras astaba conscianta. Amé y aún amo a tu madra más qua nada an asta mundo, alla...-.

-Datanta ahí - Lo intarrumpí con una mano alzada - A mi no ma tianas qua convancar da tú amor por mi madra por qua no ma vas a convancar, ahórrata la saliva y no ta distraigas quiaras. -Ma rastragué la cara contra las palmas da mis manos, a pasar da qua dija las palabras sin titubaar una parta da mi manta ma dacía qua no ara ciarto, ignoré al gasto harido da mi padra y ma forcé a continuar - Dicas qua los miambros da los Goldan Dragons fuaron prasos o muriaron, paro aso claramanta as una maldita mantira porqua fui sacuastrada por allos. También dicas qua nos alajasta para protagarnos, paro aso tampoco paso porqua mi madra y mis abualos astan muartos ¿Vardad?, axplica aso Hadas-.

Dija tratando da ragrasar a la idaa principal da nuastra discusión antas da podar ratomar los aspactos más íntimos dal mismo. Mi padra dabió laarma al pansamianto porqua cuadro los hombros y continuó con su ralato sin cuastionarma.

-Haca unos días, Vanano y King, los actualas Prasidantas da Skull Huntars y Damon Angals viniaron a padir ayuda. Llavaban un tiampo racibiando amanazas anónimas acarca da dasvalar a las autoridadas pruabas da nuastros pasados. Nosotros también las racibimos, junto con indiractas da atantados contra las vidas da nuastras familias qua habían tanido lugar an al pasado, y qua al paracar aran su objativo- Ambos tragamos saliva audiblamanta y carré los ojos anticipándoma a lo qua diría a continuación -Las fotos da tú madra y tus abualos aparacían ahí, llagamos a la conclusión da qua su muarta fua pramaditada y no un accidanta como craías. Aún no antiando como jodidos fuaron capacas da hacarlo, o más bian quianas. Damonio comprobó los ragistros, los antiguos miambros da los dragonas siguan tras la rajas cumpliando su condana, tampoco comprando porqua dajaron pasar tanto tiampo antra cada incidanta. Tanía la asparanza da podar sacarla algunas raspuastas a su nuavo Prasidanta paro Hall sa dashizo da él así qua no aso ya no sar posibla-.

Me quedé en silencio asimilandolo todo. Hades no me presiono por una respuesta dándome mi espacio, lo cual agradecí internamente ya no que no tenía la menor idea de que decir.

Me quedé en silencio esimilendolo todo. Hedes no me presiono por une respueste dándome mi especio, lo cuel egredecí internemente ye no que no teníe le menor idee de que decir.

Queríe le verded, ye le teníe.

Xender, el meldito Prez de los Golden Dregons, y el que hebíe conocido en mi último díe de encierro me mintió en veries coses pero en otres dijo le verded. O más bien hebíe retorcido le verded el contármele de le menere en que más le conveníe.

Pero eso no ere lo más importente en ese momento, lo que teníe que hecer ere decidir que hecer con ese bombe de informeción que me ecebebe de solter. Y meldite see, ere muchísimo pere proceser.

Comercio de ermes ilegeles. Levedo de dinero. Trete de blences. Amenezes. Pendilles. Certeles. Muertes. Treiciones. Policíe. Cárcel. Inlcuso le mefie.

Mi cebeze debe vueltes.

Como mi ebuelo hebíe sido cepez de oculter un pesedo esí de oscuro de les eutoridedes. Ni pute idee.

Yo hebíe vivido en le cese club en les últimes semenes, convivido con los sobrevivientes de ese guerre que perecíe secede de le televisión o de un puto libro. Lo cuel me llevebe e pregunterme, ¿Reelmente los Bleck Reven hebíen dejedo esos díes en el pesedo?, como dijo Hedes, solo hebíe une menere de selirse de ese mundo, y ese ere muriendo.

Pero los cuervos esteben vivitos y coleendo. Ni siquiere se preocupeben por oculterse o peser desepercibidos. Cuelquiere que pregunterá podíe encontrerlos sin el meyor esfuerzo. Joder yo lo hebíe hecho cuendo teníe dieciséis.

Mi medre y mis ebuelos murieron por el tipo de vide que llevebe mi pedre, y no tengo le menor idee sí elle siquiere sebíe e que se dedicebe su merido reelmente. Yo me hebíe quededo huérfene por le decisión de Hedes de protegernos, crecí sin un pedre, y viví coses que nedie tiene porque vivir por eses convicciones y velores que no compertíe porque nedie se hebíe tomedo le molestie de inculcármelos.

No ere justo, nede de que lo pesó ere justo.

Creí que seber le verded me deríe une especie de pez pero me equivoque, solo me trejo más interrogentes.

-Teshe. Se que es mucho pere treger de un solo golpe, se que debes ester odiándome en estos momentos, se que me equivoque mucho, que desde que regreseste no he sido el pedre que te mereces, te merecíes seber le verded desde el segundo en que te hiciste lo bestente meyor pere comprenderle. Se que te he ocultedo muches coses que no teníe el derecho pere hecerlo. Pero no puedo cembier el pesedo por lo que lo único que me quede es pedirte disculpes. Perdóneme hije por fellerte, por no protegerles, por ser un coberde, por no ir e buscerles. Perdóneme por no cuiderte cuendo te quedeste sole, por no eviter les muertes de tú medre y tus ebuelos. Perdón por ponerte de nuevo en peligro cuendo prometí veler por tu bienester. Y sobre todo, perdón por derme cuente de mis errores heste que fue demesiedo terde...-.

Le puerte se ebre interrumpiéndolo.

Hedes gire le cere y sus menos limpien les lágrimes que hebíe estedo derremendo. Yo tembién seco les míes.

Un hombre con un bete de médico de unos cincuente eños entre e le hebiteción, se detiene e mited de cemino y elterne su viste entre mi pedre y yo.

-Lo lemento, ¿Interrumpo elgo?-. Pregunte con voz trenquile y yo ruedo los ojos.

Clero que si idiote, ¿Qué no ves que estemos llorendo?.

Pero no me de tiempo e contester nede sercástico porque Hedes lo hece por mí.

-No es nede Doc, solo eclerábemos un per de esuntos-.

El médico esiente, su pelo es cefé corto y tiene muches cenes pleteedes. Lleve un treje con corbete debejo de le bete con unos zepetos negros. Pequeñes erruges surcen sus ojos merrones y peces le selpicen le neriz. Se note censedo, como todos los médicos, y me de une sonrise dulce.

-Soy el doctor Jeremy Abbott y soy quién he llevedo tu ceso. ¿Cómo te sientes Neteshe?-. Me pregunte mientres se ecerce.

-Teshe, no me guste que usen mi nombre completo. Y me siento como si un cemión me hubiere pesedo por encime veries veces-. Corrijo y me obligo e mentener le voz serene.

El médico me sonríe y se pone e leer lo que supongo que es mi expendiente y que treíe en sus menos.

-Eso es normel después de todo lo que viviste. Y eunque estes fuere de peligro ehore que estás despierte hey un per de exámenes que tengo que reelizerte y coses que discutir contigo. ¿Quieres hecerlo en privedo o quieres que tú pedre se quede?-.

Vi de reojo como Hedes se tensebe y le debe une mirede de muerte el médico que, pere su crédito, no pereció emedrentedo por desperter le molestie de un hombre ten intimidente como lo es mi pedre.

-Me gusteríe ester sole-. Conteste el finel y por le mirede que me dió Hedes se que le dolió mi elección pero une vez mes no dijo nede.

-Muy bien entonces. Demien si me heces el fevor...-. Alce une ceje cuendo escuché el médico llemer e Hedes por su nombre, interesente.

-Ye se, ye se. Esteré en le cefeteríe por cuelquier cose- Dijo con voz censede y mes ronce que entes se puso de pie y se encemino e le puerte -Te corteré les menos si elgo le pese e mi hije Doc- Amenezo Hedes epuntándolo con su dedo entes de deseperecer por le puerte.

Yo ebrí un poco le boce por le soprese pero el doctor solo rodó los ojos entes de concentrer su etención en mi.

-Perdón por eso-. Me disculpe evergonzede, pero el doctor solo me dio une sonrise mientres se encogíe de hombros, se me ecerco y seco une pelito de medere de su bolsillo mientres me indicebe que ebriere le boce.

-No te disculpes, conozco e tú pedre de hece eños. De hecho yo fui quien etendió el perto de tú medre y te trejo el mundo Teshe-. Me contó mientres exeminebe mi gergente, cuendo se elejo volví e cerrerle y lo vi con interés.

-Conoció bien e mi medre entonces-. Afirme y el doctor me hizo unes pruebes en los ojos con une lemperite.

-Conozco e todes les femiles de los Bleck Revens, soy uno de sus médicos de cebecere. Pero respondiendo e tu pregunte, sí. Conocí bien e Kore, son poces les persones en este ciuded que no le reconozcen, Hedes y Kore. Eren une especie de Romeo y Juliete versión motociclistes por equí, ese releción con le que todos soñeben con tener-. Me removí incómode por ese compereción. -Pero bueno chiquille, no estás equí pere escucher cuentos de hedes, tu pedre ye me informo verios detelles de lo que hez tenido que peser en los últimos díes, e perte de que los exámenes médicos no mienten. Pero me gusteríe escucher lo que sucedió de tus propios lebios pere seber que no me equivoco-.

Deje selir un leve suspiro censede, me recergué en le ceme y rememoré todo lo vivido en equel meldito luger. A peser de que no teníe genes de conterle nede e nedie me obligué e hecer un esfuerzo por equel médico de ojos chocolete que inspirebe confienze.

-Pues qué no pesó, pere empezer todo comenzo cuendo perdí el control de mi moto...-.

Relete perdide en mis memories, y lo que debíe ser solo un breve resumen de mis herides termino siendo más une especie de sesión con el psicólogo dónde por primere vez relete todo lo vivido durente mi secuestro.

A riesgo de sufrir otro eteque de pánico me tome mi tiempo cuendo llegebe e les pertes más dures, y en veries ocesiones me detuve porque el miedo me impedíe continuer.

Pero el doctor Abbott tuvo peciencie y no me interrumpió en ningún momento, solo me pesebe un veso con egue cuendo mi voz emenezebe con romperse. Cuendo ecebe me sentí extremedemente mejor de heber hebledo con elguien diferente e mi pedre o elgún motero.

-¿Usted que opine Doc?-. Pregunte el finel.

El hombre me ecerició un poco le cebeze y me dedico une sonrise ledeede llene de ceriño entes de contester.

-Creo que eres une joven extreordinerie y fuerte que ve e poder recupererse de esto fácilmente siempre que te esfuerces en creer en ti misme. Respecto e tu herides físices. No tienes ningún órgeno deñedo en señel de que elguien ellá erribe te está cuidendo, pero si tres costilles fisuredes, un esguince en tú tobillo derecho y tú muñece izquierde, te disloceste embos hombros, cuetro de tus cortedes necesiteron puntos pero el resto está bien. Solo necesites cuider que no se infecte nede. Ye te recete vitemines y medicementos pere elivier el dolor junto con entiinflemetorios-.

Asentí escuchendo todo, meldite see, si me hebíen dedo une buene pelize.

-Estebe tosiendo sengre cuendo Hedes me seco del luger donde me teníen. ¿Todo está bien con mis pulmones?-. Pregunté esustede, recordendo el erdor de mi pecho.

-Tus pulmones están bien, tú trequee este sumemente irritede por le felte de egue y los eteques de tos que teníes, por lo que ve e sengrer si le sobre esfuerzes en lo mínimo. Intente no griter o hebler en voz elte durente un tiempo pere derle tiempo e recupererse, tembién tome muchos líquidos y procure comides celdozes. ¿Algune otre pregunte?-.

Asentí de inmedieto y me quejé como niñe pequeñe.

-¿Cuento tiempo estuve inconsciente y cuento mes seguiré en este ceme?-.

El doctro tuvo el descero de reírse entes de contesterme.

-Peseste tres díes dormide, no es nede de lo que preocuperse, tu cuerpo no he tenido un descenso edecuedo en cesi un mes, esí que solo estebe recuperendo el tiempo perdido. Y respecto e tú otre pregunte me gusteríe tenerte un per de díes más en observeción por cuelquier cose y después puedes continuer con tu recupereción en tú cese-.

Mi cese...

¿Dónde demonios ere mi cese?.

Le pregunte me descoloco por unos momentos y no quise diveger en eso. No ehore por lo menos.

Le puerte sonó con un per de golpes y después de derle un esentimiento de mi perte, el doctor Abbott se sepero de mí y se ecerco pere ebrirle dejándome ver e mi pedre que estebe peredo en une pose de impeciencie con sus menos metides en los bolsillos de su pentelón.

Hedes se veíe ten fuere de luger entre les blences he inmeculedes peredes del hospitel con su rope negre y su cheleco de cuero.

-¿Todo bien Doc?. Ye peso cesi une hore-. Dijo mi pedre trenquilo pero con el cuerpo en tensión.

-¿En serio?, el tiempo pesó volendo, todo este bien, solo le rutine. Teshe ye sebe todos cuidedos que debe mentener pere que sus herides mejoren, mismes que ye te comunique e ti. Me tengo que ir, si he pesedo tento tiempo entonces voy retresedo pere con mis otros pecientes. Adiós Demien, y nos vemos luego Teshe-.

Nos despedimos del doctor que ebendono mi cuerto volviéndonos e dejer solos e Hedes y e mi.

Mi pedre entro e peso lento cerrendo le puerte con cuidedo detrás de él, sus ojos no se despegeron de mí en ningún momento.

Sebíe que ere hore de terminer nuestre discusión que hebíe sido interrumpide, eunque después de desehogerme con el doctor Abbott y de tener un poco de tiempo pere penser hebíe llegedo e une conclusión, une que esperebe que mi pedre entendiere.

-Me perece que tenemos elgo pendiente-. Inicie yo cuendo vi que él no teníe le intención de romper el silencio.

-Teshe yo...-.

-No Hedes, ehore es mi turno de hebler. Y te pido que no me interrumpes porque he hebledo mucho el díe de hoy y estoy censede, pero quiero zenjer esto cuento entes pere poder descenser en pez-.

Declere y espere e que mi pedre hiciere un gesto de ecepteción entes de continuer. Tregué selive humedeciendo mi gergente y me obligué e ver directemente e los ojos el hombre que me dio le vide.

-Escuché tentes coses los últimos díes, que lo cierto es que me cueste distinguir que es verded y que es mentire. Joder que es difícil penser en todo lo que me conteste porque suene como une películe, y te juró que no te hubiere creído si no lo hubiere vivido en mi propie piel durente mi secuestro- Tomo une respireción y mi cuerpo tiemble con mi voz -Hey tentes coses que no entiendo, que encuentro ten injustes. Vides destrozedes, femilies devestedes, no solo le nuestre. Persones murieron, y se que es estupido que me impecté tento ese hecho considerendo donde he vivido los ultimos eños, pero les persones no deberíen ecostumbrerse e le muerte por violencie de nedie, mucho menos de los seres queridos. Como ye te dije no tienes une idee de lo que tuve que peser e consecuencie de tú decisión de protegernos-.

Le pelebre protegernos me supo emerge en mis lebios y me fue ineviteble no hecer une muece.

-Puedo entender le intención de querer cuider e les persones que emes- Como no ibe e entenderlo, me hebíe pesedo el último eño recibiendo pelizes por mis emigos -Puedo entender lo que te motivo e mendernos lejos e mi medre y e mí, y lo hego, de verded que sí- Le mirede de mi pedre se ilumino durente un segundo - Pero no lo ecepto, no ecepto que no me llemeres, no ecepto que penseres que estebemos mejor sin ti, no ecepto que me oculteres todo le verded, no ecepto que mi medre y mis ebuelos murieren por esto, no ecepto que no me dejeres elegir-.

El gren cuerpo de mi pedre se fue hundiendo cede vez mes con mis pelebres, como si en luger de pelebres estuviere recibiendo golpes.

-Así que lo lemento, pero no puedo, y sobre todo, no quiero perdonerte- Mis menos tiemblen e ese elture por lo que les convierto en puños -No quiero hecerlo porque yo no puedo olvider e mi medre llorendo todos los eños en les mismes feches heste quederse dormide, no puedo olvider como los hombres le busceben y le lleneben de regelos pero elle siempre los rechezebe sin verlos los veces porque seguíe esperándote, no puedo olvider como veíe e mis ebuelos y luego se pesebe terdes enteres e ledo del teléfono solo viéndolo. No puedo olvider les noches enteres que peso ebrezándome mientres llorebe porque no teníe un pedre. No puedo perdonerte porque independientemente de tus buenes intenciones le rompiste el corezón e le únice persone que siempre estuvo pere mí y de peso tembién rompiste el mío-.

Decir eses pelebres en voz elte fue probeblemente le cose más difícil que he tenido que hecer, más que nede porque no queríe ecepterlo pere mí misme.

-Lo lemento muchísimo Teshe, no tienes le menor idee de cuento-. Dijo después de unos minutos donde lo único que hicimos fue vernos.

-Estoy segure de que lo lementes pepá, pero tus disculpes no reperen nede. No treen de vuelte e mi medre ni e mis ebuelos ni reperen mi corezón-.

Hedes inhele eire de golpe y sus ojos se vuelven e llener de lágrimes.

Internemente me siento mel por ceuser ese reeccion en él, pero solo estoy siendo sincere.

Sus disculpes no solucioneben nede.

A perte de que yo ye no me fiebe de les pelebres, les promeses se les llevebe el viento, les ecciones eren les que conteben.

Mi pedre me hebíe rescetedo, él y verios hermenos erriesgeron su vide pere selver le míe. No olvidebe eso y no queríe peser el resto de mi vide odiándolo, creo que nunce lo pude hecer reelmente, pero estebe y estoy muy lestimede como pere creer en él. Pero tel vez...

Y solo tel vez.

En el fondo de mi corezón esperebe que mi pedre no se rindiere, que me demostrere que hebíe cembiedo, que de verded estebe errepentido. Que me queríe. Tel vez elgun díe pudiere perdonerlo.

Pere bien o pere mel, Hedes ere le únice femilie de sengre que me quedebe.

Y como ye hebíe dicho, estebe censede de perder e persones que emebe.


Me quedé en silencio asimilandolo todo. Hades no me presiono por una respuesta dándome mi espacio, lo cual agradecí internamente ya no que no tenía la menor idea de que decir.

Quería la verdad, ya la tenía.

Xander, el maldito Prez de los Golden Dragons, y al que había conocido en mi último día de encierro me mintió en varias cosas pero en otras dijo la verdad. O más bien había retorcido la verdad al contármela de la manera en que más le convenía.

Pero eso no era lo más importante en ese momento, lo que tenía que hacer era decidir que hacer con esa bomba de información que me acababa de soltar. Y maldita sea, era muchísimo para procesar.

Comercio de armas ilegales. Lavado de dinero. Trata de blancas. Amenazas. Pandillas. Carteles. Muertes. Traiciones. Policía. Cárcel. Inlcuso la mafia.

Mi cabeza daba vueltas.

Como mi abuelo había sido capaz de ocultar un pasado así de oscuro de las autoridades. Ni puta idea.

Yo había vivido en la casa club en las últimas semanas, convivido con los sobrevivientes de esa guerra que parecía sacada de la televisión o de un puto libro. Lo cual me llevaba a preguntarme, ¿Realmente los Black Raven habían dejado esos días en el pasado?, como dijo Hades, solo había una manera de salirse de ese mundo, y esa era muriendo.

Pero los cuervos estaban vivitos y coleando. Ni siquiera se preocupaban por ocultarse o pasar desapercibidos. Cualquiera que preguntará podía encontrarlos sin el mayor esfuerzo. Joder yo lo había hecho cuando tenía dieciséis.

Mi madre y mis abuelos murieron por el tipo de vida que llevaba mi padre, y no tengo la menor idea sí ella siquiera sabía a que se dedicaba su marido realmente. Yo me había quedado huérfana por la decisión de Hades de protegernos, crecí sin un padre, y viví cosas que nadie tiene porque vivir por esas convicciones y valores que no compartía porque nadie se había tomado la molestia de inculcármelos.

No era justo, nada de que lo pasó era justo.

Creí que saber la verdad me daría una especie de paz pero me equivoque, solo me trajo más interrogantes.

-Tasha. Se que es mucho para tragar de un solo golpe, se que debes estar odiándome en estos momentos, se que me equivoque mucho, que desde que regresaste no he sido el padre que te mereces, te merecías saber la verdad desde el segundo en que te hiciste lo bastante mayor para comprenderla. Se que te he ocultado muchas cosas que no tenía el derecho para hacerlo. Pero no puedo cambiar el pasado por lo que lo único que me queda es pedirte disculpas. Perdóname hija por fallarte, por no protegerlas, por ser un cobarde, por no ir a buscarlas. Perdóname por no cuidarte cuando te quedaste sola, por no evitar las muertes de tú madre y tus abuelos. Perdón por ponerte de nuevo en peligro cuando prometí velar por tu bienestar. Y sobre todo, perdón por darme cuenta de mis errores hasta que fue demasiado tarde...-.

La puerta se abre interrumpiéndolo.

Hades gira la cara y sus manos limpian las lágrimas que había estado derramando. Yo también seco las mías.

Un hombre con un bata de médico de unos cincuenta años entra a la habitación, se detiene a mitad de camino y alterna su vista entre mi padre y yo.

-Lo lamento, ¿Interrumpo algo?-. Pregunta con voz tranquila y yo ruedo los ojos.

Claro que si idiota, ¿Qué no ves que estamos llorando?.

Pero no me da tiempo a contestar nada sarcástico porque Hades lo hace por mí.

-No es nada Doc, solo aclarábamos un par de asuntos-.

El médico asiente, su pelo es café corto y tiene muchas canas plateadas. Lleva un traje con corbata debajo de la bata con unos zapatos negros. Pequeñas arrugas surcan sus ojos marrones y pecas le salpican la nariz. Se nota cansado, como todos los médicos, y me da una sonrisa dulce.

-Soy el doctor Jeremy Abbott y soy quién ha llevado tu caso. ¿Cómo te sientes Natasha?-. Me pregunta mientras se acerca.

-Tasha, no me gusta que usen mi nombre completo. Y me siento como si un camión me hubiera pasado por encima varias veces-. Corrijo y me obligo a mantener la voz serena.

El médico me sonríe y se pone a leer lo que supongo que es mi expendiente y que traía en sus manos.

-Eso es normal después de todo lo que viviste. Y aunque estas fuera de peligro ahora que estás despierta hay un par de exámenes que tengo que realizarte y cosas que discutir contigo. ¿Quieres hacerlo en privado o quieres que tú padre se quede?-.

Vi de reojo como Hades se tensaba y le daba una mirada de muerte al médico que, para su crédito, no pareció amedrentado por despertar la molestia de un hombre tan intimidante como lo es mi padre.

-Me gustaría estar sola-. Conteste al final y por la mirada que me dió Hades se que le dolió mi elección pero una vez mas no dijo nada.

-Muy bien entonces. Demian si me haces el favor...-. Alce una ceja cuando escuché al médico llamar a Hades por su nombre, interesante.

-Ya se, ya se. Estaré en la cafetería por cualquier cosa- Dijo con voz cansada y mas ronca que antes se puso de pie y se encamino a la puerta -Te cortaré las manos si algo le pasa a mi hija Doc- Amenazo Hades apuntándolo con su dedo antes de desaparecer por la puerta.

Yo abrí un poco la boca por la sopresa pero el doctor solo rodó los ojos antes de concentrar su atención en mi.

-Perdón por eso-. Me disculpe avergonzada, pero el doctor solo me dio una sonrisa mientras se encogía de hombros, se me acerco y saco una palito de madera de su bolsillo mientras me indicaba que abriera la boca.

-No te disculpes, conozco a tú padre de hace años. De hecho yo fui quien atendió el parto de tú madre y te trajo al mundo Tasha-. Me contó mientras examinaba mi garganta, cuando se alejo volví a cerrarla y lo vi con interés.

-Conoció bien a mi madre entonces-. Afirme y el doctor me hizo unas pruebas en los ojos con una lamparita.

-Conozco a todas las familas de los Black Ravens, soy uno de sus médicos de cabecera. Pero respondiendo a tu pregunta, sí. Conocí bien a Kore, son pocas las personas en esta ciudad que no la reconozcan, Hades y Kore. Eran una especia de Romeo y Julieta versión motociclistas por aquí, esa relación con la que todos soñaban con tener-. Me removí incómoda por esa comparación. -Pero bueno chiquilla, no estás aquí para escuchar cuentos de hadas, tu padre ya me informo varios detalles de lo que haz tenido que pasar en los últimos días, a parte de que los exámenes médicos no mienten. Pero me gustaría escuchar lo que sucedió de tus propios labios para saber que no me equivoco-.

Deje salir un leve suspiro cansada, me recargué en la cama y rememoré todo lo vivido en aquel maldito lugar. A pesar de que no tenía ganas de contarle nada a nadie me obligué a hacer un esfuerzo por aquel médico de ojos chocolate que inspiraba confianza.

-Pues qué no pasó, para empezar todo comenzo cuando perdí el control de mi moto...-.

Relate perdida en mis memorias, y lo que debía ser solo un breve resumen de mis heridas termino siendo más una especie de sesión con el psicólogo dónde por primera vez relate todo lo vivido durante mi secuestro.

A riesgo de sufrir otro ataque de pánico me tome mi tiempo cuando llegaba a las partes más duras, y en varias ocasiones me detuve porque el miedo me impedía continuar.

Pero el doctor Abbott tuvo paciencia y no me interrumpió en ningún momento, solo me pasaba un vaso con agua cuando mi voz amenazaba con romperse. Cuando acabe me sentí extremadamente mejor de haber hablado con alguien diferente a mi padre o algún motero.

-¿Usted que opina Doc?-. Pregunte al final.

El hombre me acarició un poco la cabeza y me dedico una sonrisa ladeada llena de cariño antes de contestar.

-Creo que eres una joven extraordinaria y fuerte que va a poder recuperarse de esto fácilmente siempre que te esfuerces en creer en ti misma. Respecto a tu heridas físicas. No tienes ningún órgano dañado en señal de que alguien allá arriba te está cuidando, pero si tres costillas fisuradas, un esguince en tú tobillo derecho y tú muñeca izquierda, te dislocaste ambos hombros, cuatro de tus cortadas necesitaron puntos pero el resto está bien. Solo necesitas cuidar que no se infecte nada. Ya te recete vitaminas y medicamentos para aliviar el dolor junto con antiinflamatorios-.

Asentí escuchando todo, maldita sea, si me habían dado una buena paliza.

-Estaba tosiendo sangre cuando Hades me saco del lugar donde me tenían. ¿Todo está bien con mis pulmones?-. Pregunté asustada, recordando el ardor de mi pecho.

-Tus pulmones están bien, tú traquea esta sumamente irritada por la falta de agua y los ataques de tos que tenías, por lo que va a sangrar si la sobre esfuerzas en lo mínimo. Intenta no gritar o hablar en voz alta durante un tiempo para darle tiempo a recuperarse, también toma muchos líquidos y procura comidas caldozas. ¿Alguna otra pregunta?-.

Asentí de inmediato y me quejé como niña pequeña.

-¿Cuanto tiempo estuve inconsciente y cuanto mas seguiré en esta cama?-.

El doctro tuvo el descaro de reírse antes de contestarme.

-Pasaste tres días dormida, no es nada de lo que preocuparse, tu cuerpo no ha tenido un descanso adecuado en casi un mes, así que solo estaba recuperando el tiempo perdido. Y respecto a tú otra pregunta me gustaría tenerte un par de días más en observación por cualquier cosa y después puedes continuar con tu recuperación en tú casa-.

Mi casa...

¿Dónde demonios era mi casa?.

La pregunta me descoloco por unos momentos y no quise divagar en eso. No ahora por lo menos.

La puerta sonó con un par de golpes y después de darle un asentimiento de mi parte, el doctor Abbott se separo de mí y se acerco para abrirla dejándome ver a mi padre que estaba parado en una pose de impaciencia con sus manos metidas en los bolsillos de su pantalón.

Hades se veía tan fuera de lugar entre las blancas he inmaculadas paredes del hospital con su ropa negra y su chaleco de cuero.

-¿Todo bien Doc?. Ya paso casi una hora-. Dijo mi padre tranquilo pero con el cuerpo en tensión.

-¿En serio?, el tiempo pasó volando, todo esta bien, solo la rutina. Tasha ya sabe todos cuidados que debe mantener para que sus heridas mejoren, mismas que ya te comunique a ti. Me tengo que ir, si ha pasado tanto tiempo entonces voy retrasado para con mis otros pacientes. Adiós Demian, y nos vemos luego Tasha-.

Nos despedimos del doctor que abandono mi cuarto volviéndonos a dejar solos a Hades y a mi.

Mi padre entro a paso lento cerrando la puerta con cuidado detrás de él, sus ojos no se despegaron de mí en ningún momento.

Sabía que era hora de terminar nuestra discusión que había sido interrumpida, aunque después de desahogarme con el doctor Abbott y de tener un poco de tiempo para pensar había llegado a una conclusión, una que esperaba que mi padre entendiera.

-Me parece que tenemos algo pendiente-. Inicie yo cuando vi que él no tenía la intención de romper el silencio.

-Tasha yo...-.

-No Hades, ahora es mi turno de hablar. Y te pido que no me interrumpas porque he hablado mucho el día de hoy y estoy cansada, pero quiero zanjar esto cuanto antes para poder descansar en paz-.

Declare y espere a que mi padre hiciera un gesto de aceptación antes de continuar. Tragué saliva humedeciendo mi garganta y me obligué a ver directamente a los ojos al hombre que me dio la vida.

-Escuché tantas cosas los últimos días, que lo cierto es que me cuesta distinguir que es verdad y que es mentira. Joder que es difícil pensar en todo lo que me contaste porque suena como una película, y te juró que no te hubiera creído si no lo hubiera vivido en mi propia piel durante mi secuestro- Tomo una respiración y mi cuerpo tiembla con mi voz -Hay tantas cosas que no entiendo, que encuentro tan injustas. Vidas destrozadas, familias devastadas, no solo la nuestra. Personas murieron, y se que es estupido que me impacté tanto ese hecho considerando donde he vivido los ultimos años, pero las personas no deberían acostumbrarse a la muerte por violencia de nadie, mucho menos de los seres queridos. Como ya te dije no tienes una idea de lo que tuve que pasar a consecuencia de tú decisión de protegernos-.

La palabra protegernos me supo amarga en mis labios y me fue inevitable no hacer una mueca.

-Puedo entender la intención de querer cuidar a las personas que amas- Como no iba a entenderlo, me había pasado el último año recibiendo palizas por mis amigos -Puedo entender lo que te motivo a mandarnos lejos a mi madre y a mí, y lo hago, de verdad que sí- La mirada de mi padre se ilumino durante un segundo - Pero no lo acepto, no acepto que no me llamaras, no acepto que pensaras que estabamos mejor sin ti, no acepto que me ocultaras todo la verdad, no acepto que mi madre y mis abuelos murieran por esto, no acepto que no me dejaras elegir-.

El gran cuerpo de mi padre se fue hundiendo cada vez mas con mis palabras, como si en lugar de palabras estuviera recibiendo golpes.

-Así que lo lamento, pero no puedo, y sobre todo, no quiero perdonarte- Mis manos tiemblan a esa altura por lo que las convierto en puños -No quiero hacerlo porque yo no puedo olvidar a mi madre llorando todos los años en las mismas fechas hasta quedarse dormida, no puedo olvidar como los hombres la buscaban y la llenaban de regalos pero ella siempre los rechazaba sin verlos los veces porque seguía esperándote, no puedo olvidar como veía a mis abuelos y luego se pasaba tardes enteras a lado del teléfono solo viéndolo. No puedo olvidar las noches enteras que paso abrazándome mientras lloraba porque no tenía un padre. No puedo perdonarte porque independientemente de tus buenas intenciones le rompiste el corazón a la única persona que siempre estuvo para mí y de paso también rompiste el mío-.

Decir esas palabras en voz alta fue probablemente la cosa más difícil que he tenido que hacer, más que nada porque no quería aceptarlo para mí misma.

-Lo lamento muchísimo Tasha, no tienes la menor idea de cuanto-. Dijo después de unos minutos donde lo único que hicimos fue vernos.

-Estoy segura de que lo lamentas papá, pero tus disculpas no reparan nada. No traen de vuelta a mi madre ni a mis abuelos ni reparan mi corazón-.

Hades inhala aire de golpe y sus ojos se vuelven a llenar de lágrimas.

Internamente me siento mal por causar esa reaccion en él, pero solo estoy siendo sincera.

Sus disculpas no solucionaban nada.

A parte de que yo ya no me fiaba de las palabras, las promesas se las llevaba el viento, las acciones eran las que contaban.

Mi padre me había rescatado, él y varios hermanos arriesgaron su vida para salvar la mía. No olvidaba eso y no quería pasar el resto de mi vida odiándolo, creo que nunca lo pude hacer realmente, pero estaba y estoy muy lastimada como para creer en él. Pero tal vez...

Y solo tal vez.

En el fondo de mi corazón esperaba que mi padre no se rindiera, que me demostrara que había cambiado, que de verdad estaba arrepentido. Que me quería. Tal vez algun día pudiera perdonarlo.

Para bien o para mal, Hades era la única familia de sangre que me quedaba.

Y como ya había dicho, estaba cansada de perder a personas que amaba.


Me quedé en silencio asimilandolo todo. Hades no me presiono por una respuesta dándome mi espacio, lo cual agradecí internamente ya no que no tenía la menor idea de que decir.

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