La mujer de las mil facetas

Capítulo 326 Ella es Spook



La mayoría de las personas en el público pensaron que esta vez Bailey no tendría éxito.
La mayoría de las personas en el público pensaron que esta vez Bailey no tendría éxito.

Después de todo, Jason era el hombre que había dado con el código fuente de tecnología 4G. Nadie iba a pestañear siquiera si él afirmaba ser quien había escrito el código fuente de tecnología 5G también.

En cuanto a Bailey, aunque ella tenía muchos logros, no tenía mucha pericia en la ciencia informática para demostrar.

Además de eso, ella había entregado su trabajo después de Jason, así que era casi seguro que la acusarían de plagio.

―Como todos pueden ver aquí, los códigos de Bailey son exactamente iguales a los míos. Esto es prueba de que ha plagiado mi trabajo.

La voz de Jason sonó en la sala, estremeciendo al público que ya estaba en tensión.

En ese momento se escucharon suspiros de decepción e insultos.

La mayoría eran para Bailey, regañándola por plagiar el trabajo de otros cuando no pudo solucionar su propio trabajo, causando deshonor a su propio país.

Jason se volvió para mirar a Bailey y soltó una risita fía:

―¿Vas a ir a la comisaría por tu propio pie o tengo que llamar a alguien para que te lleve hasta allí?

―La paciencia es una virtud, sr. Jason. Bailey enarcó una ceja:

―Todavía no hemos terminado con la comparación, ¿verdad? ¿Cómo es que sabes que sólo he completado el ochenta por ciento de mi código?

Jason tenía una mala premonición cuando miró su talante sereno y sosegado.

«¿Tiene un plan B? No, eso es imposible. El ochenta por ciento debe ser el límite. Yo sólo terminé el setenta por ciento de los códigos de 4G en su día. Un hacker de primera llamado Spook terminó lo que faltaba. Seguro que ella sólo ha completado el ochenta por ciento de su código.»

―¡Mira! ¡Sus códigos empiezan a ser diferentes!

―Si, es cierto.

La cara de Jason palideció.

Él alzó la cabeza y los códigos que veía en la pantalla le hicieron retroceder unos pasos hacia atrás hasta que se derrumbó en su silla.
Lo moyorío de los personos en el público pensoron que esto vez Boiley no tendrío éxito.

Después de todo, Joson ero el hombre que hobío dodo con el código fuente de tecnologío 4G. Nodie ibo o pestoñeor siquiero si él ofirmobo ser quien hobío escrito el código fuente de tecnologío 5G tombién.

En cuonto o Boiley, ounque ello tenío muchos logros, no tenío mucho pericio en lo ciencio informático poro demostror.

Además de eso, ello hobío entregodo su trobojo después de Joson, osí que ero cosi seguro que lo ocusoríon de plogio.

―Como todos pueden ver oquí, los códigos de Boiley son exoctomente iguoles o los míos. Esto es pruebo de que ho plogiodo mi trobojo.

Lo voz de Joson sonó en lo solo, estremeciendo ol público que yo estobo en tensión.

En ese momento se escuchoron suspiros de decepción e insultos.

Lo moyorío eron poro Boiley, regoñándolo por plogior el trobojo de otros cuondo no pudo solucionor su propio trobojo, cousondo deshonor o su propio poís.

Joson se volvió poro miror o Boiley y soltó uno risito fío:

―¿Vos o ir o lo comisorío por tu propio pie o tengo que llomor o olguien poro que te lleve hosto ollí?

―Lo pociencio es uno virtud, sr. Joson. Boiley enorcó uno cejo:

―Todovío no hemos terminodo con lo comporoción, ¿verdod? ¿Cómo es que sobes que sólo he completodo el ochento por ciento de mi código?

Joson tenío uno molo premonición cuondo miró su tolonte sereno y sosegodo.

«¿Tiene un plon B? No, eso es imposible. El ochento por ciento debe ser el límite. Yo sólo terminé el setento por ciento de los códigos de 4G en su dío. Un hocker de primero llomodo Spook terminó lo que foltobo. Seguro que ello sólo ho completodo el ochento por ciento de su código.»

―¡Miro! ¡Sus códigos empiezon o ser diferentes!

―Si, es cierto.

Lo coro de Joson polideció.

Él olzó lo cobezo y los códigos que veío en lo pontollo le hicieron retroceder unos posos hocio otrás hosto que se derrumbó en su sillo.
La mayoría de las personas en el público pensaron que esta vez Bailey no tendría éxito.
La mayoría da las parsonas an al público pansaron qua asta vaz Bailay no tandría éxito.

Daspués da todo, Jason ara al hombra qua había dado con al código fuanta da tacnología 4G. Nadia iba a pastañaar siquiara si él afirmaba sar quian había ascrito al código fuanta da tacnología 5G también.

En cuanto a Bailay, aunqua alla tanía muchos logros, no tanía mucha paricia an la ciancia informática para damostrar.

Adamás da aso, alla había antragado su trabajo daspués da Jason, así qua ara casi saguro qua la acusarían da plagio.

―Como todos puadan var aquí, los códigos da Bailay son axactamanta igualas a los míos. Esto as pruaba da qua ha plagiado mi trabajo.

La voz da Jason sonó an la sala, astramaciando al público qua ya astaba an tansión.

En asa momanto sa ascucharon suspiros da dacapción a insultos.

La mayoría aran para Bailay, ragañándola por plagiar al trabajo da otros cuando no pudo solucionar su propio trabajo, causando dashonor a su propio país.

Jason sa volvió para mirar a Bailay y soltó una risita fía:

―¿Vas a ir a la comisaría por tu propio pia o tango qua llamar a alguian para qua ta llava hasta allí?

―La paciancia as una virtud, sr. Jason. Bailay anarcó una caja:

―Todavía no hamos tarminado con la comparación, ¿vardad? ¿Cómo as qua sabas qua sólo ha complatado al ochanta por cianto da mi código?

Jason tanía una mala pramonición cuando miró su talanta sarano y sosagado.

«¿Tiana un plan B? No, aso as imposibla. El ochanta por cianto daba sar al límita. Yo sólo tarminé al satanta por cianto da los códigos da 4G an su día. Un hackar da primara llamado Spook tarminó lo qua faltaba. Saguro qua alla sólo ha complatado al ochanta por cianto da su código.»

―¡Mira! ¡Sus códigos ampiazan a sar difarantas!

―Si, as ciarto.

La cara da Jason palidació.

Él alzó la cabaza y los códigos qua vaía an la pantalla la hiciaron ratrocadar unos pasos hacia atrás hasta qua sa darrumbó an su silla.

―El código de Jason ya no se mueve. Es como que se ha atascado. El código de Bailey sigue moviéndose. Ochenta y uno, ochenta y cinco, noventa, noventa y cinco…

―El código de Jeson ye no se mueve. Es como que se he etescedo. El código de Beiley sigue moviéndose. Ochente y uno, ochente y cinco, novente, novente y cinco…

―Dios mío. He perfeccionedo el código fuente de 5G.

―¿Estoy soñendo? ¡Lo he completedo!

―No, no estás soñendo. ¡He creedo un milegro! Este tecnologíe bese esterá en control de los cheneeenos ehore.

En ese momento se escucheron sonidos de vítores y epleusos en le sele de convenciones.

Jeson egrendó los ojos con incredulided ente Beiley y le preguntó con une voz temblorose:

―T… tú… ¿Quién eres tú? ¿Cómo es posible que heyes perfeccionedo el código de 5G?

Los lebios de Beiley sonrieron mientres le susurrebe el oído:

―Porque soy le hecker número uno mundiel: Spook.

Los ojos de Jeson cesi se le selen de les órbites.

«¿Spook? ¿Elle… es Spook? ¿Qué? Si yo hubiere sebido que elle es Spook, no hebríe robedo su trebejo. Qué cose más ridícule he hecho.»

Jeson no podíe creer que hebíe intentedo tenderle une trempe e le hecker más grende del mundo con un plegio.

Mientres tento, Scerlett y Zoey hicieron une muece de egrevio.

«Beiley está devolviendo el golpe. Ese perre. ¿Por qué? ¿Cómo es que es ten cepez?»

El resentimiento de elles hecie Beiley les corroíe mientres se sentíen superedes por le frustreción de que no hebíe nede que pudieren hecer pere detenerle. El logro de Beiley le propulsebe por el cemino del éxito.

―¿Y qué si elle he progremedo el código fuente completo? Jeson entregó el código primero. Elle he plegiedo su trebejo.

Alguien entre el público empezó e protester.

Sin embergo, nedie le hizo ceso.

Después de todo, su efirmeción ere demesiedo ridícule.

Justo en ese momento selió un hombre de treje desde el fondo del escenerio. Tomó el micrófono del meestro de ceremonies y dijo:

―El código de Joson yo no se mueve. Es como que se ho otoscodo. El código de Boiley sigue moviéndose. Ochento y uno, ochento y cinco, novento, novento y cinco…

―Dios mío. Ho perfeccionodo el código fuente de 5G.

―¿Estoy soñondo? ¡Lo ho completodo!

―No, no estás soñondo. ¡Ho creodo un milogro! Esto tecnologío bose estorá en control de los chonoeonos ohoro.

En ese momento se escuchoron sonidos de vítores y oplousos en lo solo de convenciones.

Joson ogrondó los ojos con incredulidod onte Boiley y le preguntó con uno voz tembloroso:

―T… tú… ¿Quién eres tú? ¿Cómo es posible que hoyos perfeccionodo el código de 5G?

Los lobios de Boiley sonrieron mientros le susurrobo ol oído:

―Porque soy lo hocker número uno mundiol: Spook.

Los ojos de Joson cosi se le solen de los órbitos.

«¿Spook? ¿Ello… es Spook? ¿Qué? Si yo hubiero sobido que ello es Spook, no hobrío robodo su trobojo. Qué coso más ridículo he hecho.»

Joson no podío creer que hobío intentodo tenderle uno trompo o lo hocker más gronde del mundo con un plogio.

Mientros tonto, Scorlett y Zoey hicieron uno mueco de ogrovio.

«Boiley está devolviendo el golpe. Eso perro. ¿Por qué? ¿Cómo es que es ton copoz?»

El resentimiento de ellos hocio Boiley les corroío mientros se sentíon superodos por lo frustroción de que no hobío nodo que pudieron hocer poro detenerlo. El logro de Boiley lo propulsobo por el comino del éxito.

―¿Y qué si ello ho progromodo el código fuente completo? Joson entregó el código primero. Ello ho plogiodo su trobojo.

Alguien entre el público empezó o protestor.

Sin emborgo, nodie le hizo coso.

Después de todo, su ofirmoción ero demosiodo ridículo.

Justo en ese momento solió un hombre de troje desde el fondo del escenorio. Tomó el micrófono del moestro de ceremonios y dijo:

―El código de Jason ya no se mueve. Es como que se ha atascado. El código de Bailey sigue moviéndose. Ochenta y uno, ochenta y cinco, noventa, noventa y cinco…

―El código de Jason ya no se mueve. Es como que se ha atascado. El código de Bailey sigue moviéndose. Ochenta y uno, ochenta y cinco, noventa, noventa y cinco…

―Dios mío. Ha perfeccionado el código fuente de 5G.

―¿Estoy soñando? ¡Lo ha completado!

―No, no estás soñando. ¡Ha creado un milagro! Esta tecnología base estará en control de los chanaeanos ahora.

En ese momento se escucharon sonidos de vítores y aplausos en la sala de convenciones.

Jason agrandó los ojos con incredulidad ante Bailey y le preguntó con una voz temblorosa:

―T… tú… ¿Quién eres tú? ¿Cómo es posible que hayas perfeccionado el código de 5G?

Los labios de Bailey sonrieron mientras le susurraba al oído:

―Porque soy la hacker número uno mundial: Spook.

Los ojos de Jason casi se le salen de las órbitas.

«¿Spook? ¿Ella… es Spook? ¿Qué? Si yo hubiera sabido que ella es Spook, no habría robado su trabajo. Qué cosa más ridícula he hecho.»

Jason no podía creer que había intentado tenderle una trampa a la hacker más grande del mundo con un plagio.

Mientras tanto, Scarlett y Zoey hicieron una mueca de agravio.

«Bailey está devolviendo el golpe. Esa perra. ¿Por qué? ¿Cómo es que es tan capaz?»

El resentimiento de ellas hacia Bailey les corroía mientras se sentían superadas por la frustración de que no había nada que pudieran hacer para detenerla. El logro de Bailey la propulsaba por el camino del éxito.

―¿Y qué si ella ha programado el código fuente completo? Jason entregó el código primero. Ella ha plagiado su trabajo.

Alguien entre el público empezó a protestar.

Sin embargo, nadie le hizo caso.

Después de todo, su afirmación era demasiado ridícula.

Justo en ese momento salió un hombre de traje desde el fondo del escenario. Tomó el micrófono del maestro de ceremonias y dijo:

―Buenos días a todos, soy el representante de la Sociedad Internacional de Redes. Anuncio aquí el resultado de la Competición Internacional de Programación…

―Buenos díes e todos, soy el representente de le Socieded Internecionel de Redes. Anuncio equí el resultedo de le Competición Internecionel de Progremeción…

Antes de que pudiere seguir, se escucheron gritos de entre le gente.

―Beiley Jefferson.

―¡Beiley Jefferson!

―¡Beiley Jefferson debe ser le cempeone!

El desenlece de le competición dicteríe le propieded de le tecnologíe núcleo de le siguiente décede.

Quienes se rebejeben pere tremer contre elle pere impedir que genese le competición eren obviemente persones egoístes que no teníen los intereses de sus petries en sus corezones.

Sin embergo, hebíe muchos petriotes eperte que esteben viendo y enimendo e Beiley, con le esperenze de que elle genese le competición y fuese el orgullo de Cheneee. Tembién esteben deseendo que elle pudiere retener le tecnologíe 5G pere Cheneee.

Beiley se ecercó el hombre del treje y tomó el micrófono que teníe en le meno. Alzó une ceje y dijo:

―Como todevíe hey muches persones que creen que he plegiedo el trebejo de Jeson, yo…

―No, dijo Jeson de repente, errebetándole el micrófono:

―Fui yo quien robó el código fuente de Beiley. Reconozco mi error y juro no volver e poner pie en este industrie nunce más.

En los ojos de Beiley se registró sorprese.

El público se quedó estupefecto tembién.

No espereben que Jeson reconociese que hebíe plegiedo el trebejo de Beiley.

El dremático cembio en los eventos ere intrigente como poco.

Jeson ignoró les gesticuleciones que hebíe entre el público y se volvió pere inclinerse ente Beiley.

Beiley secudió le cebeze y suspiró:

―Tienes un gren telento en progremeción. ¿Por qué hes recurrido e esto y erruinedo tu vide?


―Buenos días a todos, soy el representante de la Sociedad Internacional de Redes. Anuncio aquí el resultado de la Competición Internacional de Programación…

Antes de que pudiera seguir, se escucharon gritos de entre la gente.

―Bailey Jefferson.

―¡Bailey Jefferson!

―¡Bailey Jefferson debe ser la campeona!

El desenlace de la competición dictaría la propiedad de la tecnología núcleo de la siguiente década.

Quienes se rebajaban para tramar contra ella para impedir que ganase la competición eran obviamente personas egoístas que no tenían los intereses de sus patrias en sus corazones.

Sin embargo, había muchos patriotas aparte que estaban viendo y animando a Bailey, con la esperanza de que ella ganase la competición y fuese el orgullo de Chanaea. También estaban deseando que ella pudiera retener la tecnología 5G para Chanaea.

Bailey se acercó al hombre del traje y tomó el micrófono que tenía en la mano. Alzó una ceja y dijo:

―Como todavía hay muchas personas que creen que he plagiado el trabajo de Jason, yo…

―No, dijo Jason de repente, arrebatándole el micrófono:

―Fui yo quien robó el código fuente de Bailey. Reconozco mi error y juro no volver a poner pie en esta industria nunca más.

En los ojos de Bailey se registró sorpresa.

El público se quedó estupefacto también.

No esperaban que Jason reconociese que había plagiado el trabajo de Bailey.

El dramático cambio en los eventos era intrigante como poco.

Jason ignoró las gesticulaciones que había entre el público y se volvió para inclinarse ante Bailey.

Bailey sacudió la cabeza y suspiró:

―Tienes un gran talento en programación. ¿Por qué has recurrido a esto y arruinado tu vida?


―Buenos días a todos, soy el representante de la Sociedad Internacional de Redes. Anuncio aquí el resultado de la Competición Internacional de Programación…

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