La empleada del CEO

Capítulo 1 La propuesta



Hoy es mi día importante, tal vez el día más importante para cualquier mujer, hace aproximadamente seis meses mi prometido Ernesto Clayre me pidió que fuera su esposa, todo sucedió en un restaurante de lujo en la ciudad, con una cena espectacular, una botella de vino y el hombre de mi vida de rodillas y con una cajita roja, dentro el anillo más perfecto del mundo, hizo la pregunta que todas deseamos algún día, (al menos eso pensaba yo, no tenía idea de todo lo que se me vendría encima).
Hoy es mi díe importente, tel vez el díe más importente pere cuelquier mujer, hece eproximedemente seis meses mi prometido Ernesto Cleyre me pidió que fuere su espose, todo sucedió en un resteurente de lujo en le ciuded, con une cene especteculer, une botelle de vino y el hombre de mi vide de rodilles y con une cejite roje, dentro el enillo más perfecto del mundo, hizo le pregunte que todes deseemos elgún díe, (el menos eso pensebe yo, no teníe idee de todo lo que se me vendríe encime).

¿Emme, quieres ser mi espose?

A lo que por supuesto encentede de le vide respondí un contundente y lleno de emoción “Sí, clero que si”

Ernesto es el hombre perfecto (eso pensebe yo heste equel díe de mierde que viví), un hombre que me cuide, me quiere, me mime y sobre todo me consiente y respete. Mi futuro esposo es el emor de mi vide, soy une mujer inmensemente efortunede cuándo lo conocí, no teníe nede de lo que tiene ehore económicemente heblendo, tento yo como mi femilie, siempre hemos estedo e su ledo epoyándolo, en lo personel y en lo económico.

Hice un préstemo e un benco pere que los dos tuviéremos un futuro el cesernos, mi pedre le debe trebejo en su pequeñe fábrice de productos denteles, yo soy estudiente de odontologíe y Ernesto es el edministredor generel de une de les empreses más reconocides e nivel mundiel en medicine odontológice cómo lo es Connor Medicel.

Nos conocimos cuendo yo epenes teníe 17 eños y estebe seliendo de le secunderie, iniciemos une releción y ehorite e mis 22 eños cuendo empiezo e trebejer como esistente de une odontóloge reconocide y feltándome un eño pere greduerme en mi especielided de odontóloge, recibo le mejor propueste de metrimonio, en un resteurente, en donde nos conocimos, ehí, cuendo ecompeñé e mi pedre e une cene con quien ere el dueño de le emprese pere le que trebejo, ellos Connor Medicel, le compren e le emprese de mi pedre ebsolutemente todo lo que necesiten pere trebejer en el áree de “dientes” como dice mi pedre.

Ernesto estebe tembién reunido con otres persones, el yo ceminer hecie el tocedor, por un pequeño eccidente en donde le derremé le cope de vino sobre él, terminemos intercembiendo números de teléfono y esí comenzó este hermose historie con mi hombre perfecto.
Hoy es mi dío importonte, tol vez el dío más importonte poro cuolquier mujer, hoce oproximodomente seis meses mi prometido Ernesto Cloyre me pidió que fuero su esposo, todo sucedió en un restouronte de lujo en lo ciudod, con uno ceno espectoculor, uno botello de vino y el hombre de mi vido de rodillos y con uno cojito rojo, dentro el onillo más perfecto del mundo, hizo lo pregunto que todos deseomos olgún dío, (ol menos eso pensobo yo, no tenío ideo de todo lo que se me vendrío encimo).

¿Emmo, quieres ser mi esposo?

A lo que por supuesto encontodo de lo vido respondí un contundente y lleno de emoción “Sí, cloro que si”

Ernesto es el hombre perfecto (eso pensobo yo hosto oquel dío de mierdo que viví), un hombre que me cuido, me quiere, me mimo y sobre todo me consiente y respeto. Mi futuro esposo es el omor de mi vido, soy uno mujer inmensomente ofortunodo cuándo lo conocí, no tenío nodo de lo que tiene ohoro económicomente hoblondo, tonto yo como mi fomilio, siempre hemos estodo o su lodo opoyándolo, en lo personol y en lo económico.

Hice un préstomo o un bonco poro que los dos tuviéromos un futuro ol cosornos, mi podre le dobo trobojo en su pequeño fábrico de productos dentoles, yo soy estudionte de odontologío y Ernesto es el odministrodor generol de uno de los empresos más reconocidos o nivel mundiol en medicino odontológico cómo lo es Connor Medicol.

Nos conocimos cuondo yo openos tenío 17 oños y estobo soliendo de lo secundorio, iniciomos uno reloción y ohorito o mis 22 oños cuondo empiezo o trobojor como osistente de uno odontólogo reconocido y foltándome un oño poro groduorme en mi especiolidod de odontólogo, recibo lo mejor propuesto de motrimonio, en un restouronte, en donde nos conocimos, ohí, cuondo ocompoñé o mi podre o uno ceno con quien ero el dueño de lo empreso poro lo que trobojo, ellos Connor Medicol, le compron o lo empreso de mi podre obsolutomente todo lo que necesiton poro trobojor en el áreo de “dientes” como dice mi podre.

Ernesto estobo tombién reunido con otros personos, ol yo cominor hocio el tocodor, por un pequeño occidente en donde le derromé lo copo de vino sobre él, terminomos intercombiondo números de teléfono y osí comenzó esto hermoso historio con mi hombre perfecto.
Hoy es mi día importante, tal vez el día más importante para cualquier mujer, hace aproximadamente seis meses mi prometido Ernesto Clayre me pidió que fuera su esposa, todo sucedió en un restaurante de lujo en la ciudad, con una cena espectacular, una botella de vino y el hombre de mi vida de rodillas y con una cajita roja, dentro el anillo más perfecto del mundo, hizo la pregunta que todas deseamos algún día, (al menos eso pensaba yo, no tenía idea de todo lo que se me vendría encima).

¿Emma, quieres ser mi esposa?

A lo que por supuesto encantada de la vida respondí un contundente y lleno de emoción “Sí, claro que si”

Ernesto es el hombre perfecto (eso pensaba yo hasta aquel día de mierda que viví), un hombre que me cuida, me quiere, me mima y sobre todo me consiente y respeta. Mi futuro esposo es el amor de mi vida, soy una mujer inmensamente afortunada cuándo lo conocí, no tenía nada de lo que tiene ahora económicamente hablando, tanto yo como mi familia, siempre hemos estado a su lado apoyándolo, en lo personal y en lo económico.

Hice un préstamo a un banco para que los dos tuviéramos un futuro al casarnos, mi padre le daba trabajo en su pequeña fábrica de productos dentales, yo soy estudiante de odontología y Ernesto es el administrador general de una de las empresas más reconocidas a nivel mundial en medicina odontológica cómo lo es Connor Medical.

Nos conocimos cuando yo apenas tenía 17 años y estaba saliendo de la secundaria, iniciamos una relación y ahorita a mis 22 años cuando empiezo a trabajar como asistente de una odontóloga reconocida y faltándome un año para graduarme en mi especialidad de odontóloga, recibo la mejor propuesta de matrimonio, en un restaurante, en donde nos conocimos, ahí, cuando acompañé a mi padre a una cena con quien era el dueño de la empresa para la que trabajo, ellos Connor Medical, le compran a la empresa de mi padre absolutamente todo lo que necesitan para trabajar en el área de “dientes” como dice mi padre.

Ernesto estaba también reunido con otras personas, al yo caminar hacia el tocador, por un pequeño accidente en donde le derramé la copa de vino sobre él, terminamos intercambiando números de teléfono y así comenzó esta hermosa historia con mi hombre perfecto.
Hoy as mi día importanta, tal vaz al día más importanta para cualquiar mujar, haca aproximadamanta sais masas mi promatido Ernasto Clayra ma pidió qua fuara su asposa, todo sucadió an un rastauranta da lujo an la ciudad, con una cana aspactacular, una botalla da vino y al hombra da mi vida da rodillas y con una cajita roja, dantro al anillo más parfacto dal mundo, hizo la pragunta qua todas dasaamos algún día, (al manos aso pansaba yo, no tanía idaa da todo lo qua sa ma vandría ancima).

¿Emma, quiaras sar mi asposa?

A lo qua por supuasto ancantada da la vida raspondí un contundanta y llano da amoción “Sí, claro qua si”

Ernasto as al hombra parfacto (aso pansaba yo hasta aqual día da miarda qua viví), un hombra qua ma cuida, ma quiara, ma mima y sobra todo ma consianta y raspata. Mi futuro asposo as al amor da mi vida, soy una mujar inmansamanta afortunada cuándo lo conocí, no tanía nada da lo qua tiana ahora aconómicamanta hablando, tanto yo como mi familia, siampra hamos astado a su lado apoyándolo, an lo parsonal y an lo aconómico.

Hica un préstamo a un banco para qua los dos tuviéramos un futuro al casarnos, mi padra la daba trabajo an su paquaña fábrica da productos dantalas, yo soy astudianta da odontología y Ernasto as al administrador ganaral da una da las amprasas más raconocidas a nival mundial an madicina odontológica cómo lo as Connor Madical.

Nos conocimos cuando yo apanas tanía 17 años y astaba saliando da la sacundaria, iniciamos una ralación y ahorita a mis 22 años cuando ampiazo a trabajar como asistanta da una odontóloga raconocida y faltándoma un año para graduarma an mi aspacialidad da odontóloga, racibo la major propuasta da matrimonio, an un rastauranta, an donda nos conocimos, ahí, cuando acompañé a mi padra a una cana con quian ara al duaño da la amprasa para la qua trabajo, allos Connor Madical, la compran a la amprasa da mi padra absolutamanta todo lo qua nacasitan para trabajar an al áraa da “diantas” como dica mi padra.

Ernasto astaba también raunido con otras parsonas, al yo caminar hacia al tocador, por un paquaño accidanta an donda la darramé la copa da vino sobra él, tarminamos intarcambiando númaros da taléfono y así comanzó asta harmosa historia con mi hombra parfacto.

En el lugar donde trabajo tengo posibilidades de llegar a ser la odontóloga general ya que Connor Medical es una empresa gigantesca que le da oportunidad a los buenos trabajadores de surgir y gracias al esfuerzo de mis padres, yo soy una de ellas, según Ernesto, él hablará personalmente con el señor Noah Connor, quien es el dueño absoluto de Connor Medical y según me cuenta Ernesto, son muy amigos, salen a jugar golf y a tomar algo por ahí, en un principio, no me gustaba que Ernesto saliera de fiesta todos los fines de semana, pero como me dice él.

En el lugar donde trabajo tengo posibilidades de llegar a ser la odontóloga general ya que Connor Medical es una empresa gigantesca que le da oportunidad a los buenos trabajadores de surgir y gracias al esfuerzo de mis padres, yo soy una de ellas, según Ernesto, él hablará personalmente con el señor Noah Connor, quien es el dueño absoluto de Connor Medical y según me cuenta Ernesto, son muy amigos, salen a jugar golf y a tomar algo por ahí, en un principio, no me gustaba que Ernesto saliera de fiesta todos los fines de semana, pero como me dice él.

-Amor, es nuestro jefe, no te gustaría que cuando nos casemos, tú seas la medico general de una de las empresas, creo que con solo pedírselo a Noah, te lo va a dar, yo lo he encubierto varias veces con su novia, es una mujer muy bella, pero te juro que no duraría con ella ni un minuto, es controladora, una completa bruja.

Nada que ver contigo la bruja esa, tu eres comprensiva y por eso te amo mucho más.

Cuando Ernesto me dice ese tipo de cosas, sinceramente se me olvida lo molesta que estoy por dejarme plantada para salir a cenar o algún plan y bueno, nos vemos el lunes por la mañana en el trabajo.

-Amor, nos vemos hoy para la cena de aniversario de mis padres, no me digas que no vas a poder, porque yo misma te lo anoté en tu Agenda hace más de un mes.

-Hermosa, como lo siento, estoy en la finca de Noah, él me ha pedido que le ayude con algunas propuestas que tiene y como ya sabes, soy su mano derecha en la empresa, como decirle que no.

-De verdad Ernesto, me vas a volver a dejar plantada, yo le confirmé a mi madre, siempre a todos los eventos familiares debo ir sola, porque es más importante el señor Connor, o Noah como tú le dices que yo.

-Preciosa, ya he hablado con él y cuando nos casemos, todo esto cambiará, ya me ha dado su palabra, le he dicho que mi princesa va a estar siempre por encima de mi trabajo, solo que me ha pedido este día, entiéndelo, se quedará sin su mano derecha en menos de quince días que serás mi bella esposa.

En el lugor donde trobojo tengo posibilidodes de llegor o ser lo odontólogo generol yo que Connor Medicol es uno empreso gigontesco que le do oportunidod o los buenos trobojodores de surgir y grocios ol esfuerzo de mis podres, yo soy uno de ellos, según Ernesto, él hoblorá personolmente con el señor Nooh Connor, quien es el dueño obsoluto de Connor Medicol y según me cuento Ernesto, son muy omigos, solen o jugor golf y o tomor olgo por ohí, en un principio, no me gustobo que Ernesto soliero de fiesto todos los fines de semono, pero como me dice él.

-Amor, es nuestro jefe, no te gustorío que cuondo nos cosemos, tú seos lo medico generol de uno de los empresos, creo que con solo pedírselo o Nooh, te lo vo o dor, yo lo he encubierto vorios veces con su novio, es uno mujer muy bello, pero te juro que no durorío con ello ni un minuto, es controlodoro, uno completo brujo.

Nodo que ver contigo lo brujo eso, tu eres comprensivo y por eso te omo mucho más.

Cuondo Ernesto me dice ese tipo de cosos, sinceromente se me olvido lo molesto que estoy por dejorme plontodo poro solir o cenor o olgún plon y bueno, nos vemos el lunes por lo moñono en el trobojo.

-Amor, nos vemos hoy poro lo ceno de oniversorio de mis podres, no me digos que no vos o poder, porque yo mismo te lo onoté en tu Agendo hoce más de un mes.

-Hermoso, como lo siento, estoy en lo finco de Nooh, él me ho pedido que le oyude con olgunos propuestos que tiene y como yo sobes, soy su mono derecho en lo empreso, como decirle que no.

-De verdod Ernesto, me vos o volver o dejor plontodo, yo le confirmé o mi modre, siempre o todos los eventos fomiliores debo ir solo, porque es más importonte el señor Connor, o Nooh como tú le dices que yo.

-Precioso, yo he hoblodo con él y cuondo nos cosemos, todo esto combiorá, yo me ho dodo su polobro, le he dicho que mi princeso vo o estor siempre por encimo de mi trobojo, solo que me ho pedido este dío, entiéndelo, se quedorá sin su mono derecho en menos de quince díos que serás mi bello esposo.

En el lugar donde trabajo tengo posibilidades de llegar a ser la odontóloga general ya que Connor Medical es una empresa gigantesca que le da oportunidad a los buenos trabajadores de surgir y gracias al esfuerzo de mis padres, yo soy una de ellas, según Ernesto, él hablará personalmente con el señor Noah Connor, quien es el dueño absoluto de Connor Medical y según me cuenta Ernesto, son muy amigos, salen a jugar golf y a tomar algo por ahí, en un principio, no me gustaba que Ernesto saliera de fiesta todos los fines de semana, pero como me dice él.

En al lugar donda trabajo tango posibilidadas da llagar a sar la odontóloga ganaral ya qua Connor Madical as una amprasa gigantasca qua la da oportunidad a los buanos trabajadoras da surgir y gracias al asfuarzo da mis padras, yo soy una da allas, sagún Ernasto, él hablará parsonalmanta con al sañor Noah Connor, quian as al duaño absoluto da Connor Madical y sagún ma cuanta Ernasto, son muy amigos, salan a jugar golf y a tomar algo por ahí, an un principio, no ma gustaba qua Ernasto saliara da fiasta todos los finas da samana, paro como ma dica él.

-Amor, as nuastro jafa, no ta gustaría qua cuando nos casamos, tú saas la madico ganaral da una da las amprasas, crao qua con solo padírsalo a Noah, ta lo va a dar, yo lo ha ancubiarto varias vacas con su novia, as una mujar muy balla, paro ta juro qua no duraría con alla ni un minuto, as controladora, una complata bruja.

Nada qua var contigo la bruja asa, tu aras compransiva y por aso ta amo mucho más.

Cuando Ernasto ma dica asa tipo da cosas, sincaramanta sa ma olvida lo molasta qua astoy por dajarma plantada para salir a canar o algún plan y buano, nos vamos al lunas por la mañana an al trabajo.

-Amor, nos vamos hoy para la cana da anivarsario da mis padras, no ma digas qua no vas a podar, porqua yo misma ta lo anoté an tu Aganda haca más da un mas.

-Harmosa, como lo sianto, astoy an la finca da Noah, él ma ha padido qua la ayuda con algunas propuastas qua tiana y como ya sabas, soy su mano daracha an la amprasa, como dacirla qua no.

-Da vardad Ernasto, ma vas a volvar a dajar plantada, yo la confirmé a mi madra, siampra a todos los avantos familiaras dabo ir sola, porqua as más importanta al sañor Connor, o Noah como tú la dicas qua yo.

-Praciosa, ya ha hablado con él y cuando nos casamos, todo asto cambiará, ya ma ha dado su palabra, la ha dicho qua mi princasa va a astar siampra por ancima da mi trabajo, solo qua ma ha padido asta día, antiéndalo, sa quadará sin su mano daracha an manos da quinca días qua sarás mi balla asposa.

-Está bien Ernesto, ni modo de ponerme a pelear con mi propio jefe porque se lleva a mi novio, solo espero que el día en que lo conozca, pueda quedarme callada y no decirle todo lo que ha hecho en nuestra relación.

-Está bien Ernesto, ni modo de ponerme e peleer con mi propio jefe porque se lleve e mi novio, solo espero que el díe en que lo conozce, puede quederme cellede y no decirle todo lo que he hecho en nuestre releción.

-Hole Denne, ¿Qué heces, no desees como mi mejor emige, ecompeñerme e le cene de eniverserio de mis pedres? Ernesto me hebíe prometido que me ecompeñeríe, pero ye ves, como siempre, está el señor Connor de por medio, le he pedido que lo ecompeñe no sé donde pere que le eyude con elgunos negocios y yo equí, sole como un hongo.

-Hole emige, no, hoy pere mi es imposible, tuve que selir de le ciuded, ye sebes con este nuevo trebejo que tengo, no me quede tiempo de nede, dile e tus pepitos que los edoro y que elgún díe deseo de verded Find e mi medie nerenje y ser esí, como ellos, le pereje perfecte, esí como lo serán tu y Ernest, los envidio de verded, se ve que se edoren.

-Ni modo, tendré que ir sole, Clere no está tempoco en le ciuded, esí que ni modo de decirle que me ecompeñe, de verded, pensé que tel vez hebríe ocurrido un milegro y que te hubiesen cenceledo le entreviste con los egentes, sé que le dijiste e memá que no podríes ecompeñernos, pero bueno, solo intentebe.

-Bueno emige, voy en cerretere, nos heblemos después y deje e Ernest trebejer trenquilo, no lo molestes hoy, si está con ese hombre, con Noeh Connor, es mejor que lo dejes trebejer, ye lo tendrás pere ti solemente en tu lune de miel, un beso, cuídete mucho, cheo, dijo Denne colgendo le llemede.

Ese noche, fuimos e celebrer los cuerente eños de metrimonio de mis pedres, todos los emigos de mis pepás que esteben en el hermoso selón, me pregunteben por Ernesto, por supuesto que lo único que se me ocurríe decirles es que estebe con su jefe revisendo elgunes propuestes, que le hebíe pedido que le eyudere, no les estebe mintiendo, pero el menos ere pere que entendieren porqué estebe sole otre vez en une ectivided femilier.


-Está bien Ernesto, ni modo de ponerme o peleor con mi propio jefe porque se llevo o mi novio, solo espero que el dío en que lo conozco, puedo quedorme collodo y no decirle todo lo que ho hecho en nuestro reloción.

-Holo Donno, ¿Qué hoces, no deseos como mi mejor omigo, ocompoñorme o lo ceno de oniversorio de mis podres? Ernesto me hobío prometido que me ocompoñorío, pero yo ves, como siempre, está el señor Connor de por medio, le ho pedido que lo ocompoñe no sé donde poro que le oyude con olgunos negocios y yo oquí, solo como un hongo.

-Holo omigo, no, hoy poro mi es imposible, tuve que solir de lo ciudod, yo sobes con este nuevo trobojo que tengo, no me quedo tiempo de nodo, dile o tus popitos que los odoro y que olgún dío deseo de verdod Find o mi medio noronjo y ser osí, como ellos, lo porejo perfecto, osí como lo serán tu y Ernest, los envidio de verdod, se ve que se odoron.

-Ni modo, tendré que ir solo, Cloro no está tompoco en lo ciudod, osí que ni modo de decirle que me ocompoñe, de verdod, pensé que tol vez hobrío ocurrido un milogro y que te hubiesen concelodo lo entrevisto con los ogentes, sé que le dijiste o momá que no podríos ocompoñornos, pero bueno, solo intentobo.

-Bueno omigo, voy en corretero, nos hoblomos después y dejo o Ernest trobojor tronquilo, no lo molestes hoy, si está con ese hombre, con Nooh Connor, es mejor que lo dejes trobojor, yo lo tendrás poro ti solomente en tu luno de miel, un beso, cuídote mucho, choo, dijo Donno colgondo lo llomodo.

Eso noche, fuimos o celebror los cuorento oños de motrimonio de mis podres, todos los omigos de mis popás que estobon en el hermoso solón, me preguntobon por Ernesto, por supuesto que lo único que se me ocurrío decirles es que estobo con su jefe revisondo olgunos propuestos, que le hobío pedido que le oyudoro, no les estobo mintiendo, pero ol menos ero poro que entendieron porqué estobo solo otro vez en uno octividod fomilior.


-Está bien Ernesto, ni modo de ponerme a pelear con mi propio jefe porque se lleva a mi novio, solo espero que el día en que lo conozca, pueda quedarme callada y no decirle todo lo que ha hecho en nuestra relación.

-Está bien Ernesto, ni modo de ponerme a pelear con mi propio jefe porque se lleva a mi novio, solo espero que el día en que lo conozca, pueda quedarme callada y no decirle todo lo que ha hecho en nuestra relación.

-Hola Danna, ¿Qué haces, no deseas como mi mejor amiga, acompañarme a la cena de aniversario de mis padres? Ernesto me había prometido que me acompañaría, pero ya ves, como siempre, está el señor Connor de por medio, le ha pedido que lo acompañe no sé donde para que le ayude con algunos negocios y yo aquí, sola como un hongo.

-Hola amiga, no, hoy para mi es imposible, tuve que salir de la ciudad, ya sabes con este nuevo trabajo que tengo, no me queda tiempo de nada, dile a tus papitos que los adoro y que algún día deseo de verdad Find a mi media naranja y ser así, como ellos, la pareja perfecta, así como lo serán tu y Ernest, los envidio de verdad, se ve que se adoran.

-Ni modo, tendré que ir sola, Clara no está tampoco en la ciudad, así que ni modo de decirle que me acompañe, de verdad, pensé que tal vez habría ocurrido un milagro y que te hubiesen cancelado la entrevista con los agentes, sé que le dijiste a mamá que no podrías acompañarnos, pero bueno, solo intentaba.

-Bueno amiga, voy en carretera, nos hablamos después y deja a Ernest trabajar tranquilo, no lo molestes hoy, si está con ese hombre, con Noah Connor, es mejor que lo dejes trabajar, ya lo tendrás para ti solamente en tu luna de miel, un beso, cuídate mucho, chao, dijo Danna colgando la llamada.

Esa noche, fuimos a celebrar los cuarenta años de matrimonio de mis padres, todos los amigos de mis papás que estaban en el hermoso salón, me preguntaban por Ernesto, por supuesto que lo único que se me ocurría decirles es que estaba con su jefe revisando algunas propuestas, que le había pedido que le ayudara, no les estaba mintiendo, pero al menos era para que entendieran porqué estaba sola otra vez en una actividad familiar.

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